La gobernadora Wanda Vázquez Garced acudió esta mañana a la televisora estatal para reiterar que el nuevo Código Civil, que entrará en vigor en poco menos de 180 días, no elimina los derechos reconocidos por los tribunales, sino que los incorpora en un lenguaje más sencillo y fácil de entender que la versión todavía vigente de la ley.

La mandataria y el liderato de la Asamblea Legislativa han sido objeto de numerosas críticas tanto por la forma apresurada con que se completó la aprobación de este estatuto, el más importante después de la constitución, y por las disposiciones u omisiones asociadas a los derechos reproductivos de las mujeres y la comunidad LGBTTQ+, entre otros asuntos.

“Siempre va a haber personas que, de alguna manera, entiendan que hay una interpretación diferente, pero el tribunal de manera complementaria aclarará cualquier duda… El pueblo no debe confundirse de esta mala interpretación del código civil (la de los críticos), porque eso es lo que podría pensar de los argumentos que se han hecho”, dijo la gobernadora sobre sus detractores en el tema durante el programa de televisión de la Corporación de Puerto Rico para la Difusión Pública (WIPR) en la que estuvo acompañada de profesores de derecho.

La mandataria resaltó que, aunque en el Senado no se llevaron a cabo audiencias para evaluar el nuevo código civil, sí se llevaron 16 vistas públicas en la Cámara de Representantes.

Dijo, por ejemplo, que no hay contradicción entre permitir que las personas puedan plasmar un cambio de sexo en su certificado de nacimiento mientras, por ley, se obliga a mantener el dato “histórico” del sexo al nacer en el acta que mantiene el Registro Demográfico en sus archivos. Estos últimos, bajo la nueva ley, serían sujetos a anotaciones sobre el cambio de sexo.

Del mismo modo, aseguró que los derechos reproductivos de las mujeres están garantizados y que las protecciones extendidas a los fetos, como la capacidad de heredar bienes, están sujetas a que la criatura nazca con vida.

“En el caso de la mujer, la autonomía física, está garantizada. Expresamente esta dicho que no se vulnera el derecho de la mujer sobre su cuerpo”, aseguró la mandataria.

Rubén Nigaglioni, uno de los abogados que asesoró a la Comisión de lo Jurídico de la Cámara de Representantes en la elaboración de la medida, tildó las críticas sobre la medida como “medias verdades” y “distorsiones” de la realidad y atribuyó “mala fe” en la discusión crítica de la medida. Especialmente, se mostró incómodo por las evaluaciones periodísticas de la defensa hecha por la gobernadora del proyecto.

Generalizó, además, afirmando que los críticos de la medida leen o interpretan de manera prejuiciada el proyecto, especialmente en lo que respecta a los derechos de los no nacidos.

Grupos de abogan por la protección de derechos humanos de la comunidad LGBTTQ+ han alertado, entre otras cosas, que el nuevo código establece un lenguaje ambiguo en lo que respecta al derecho al aborto, el matrimonio y el cambio de sexo en la documentación gubernamental de las personas transexuales. Esto podría abrir la puerta a nuevas interpretaciones judiciales que generen retrocesos en la lucha de los derechos de la comunidad LGBTTQ+.

Durante la transmisión, la exjueza Nydia Jimenez Sánchez, al referirse a la “ambigüedad” denunciada por los grupos de abogan por los derechos humanos, indicó que, por ejemplo, se optó por definir el matrimonio como la unión legal de dos personas naturales para evitar el discrimen. Del mismo modo, se flexibiliza el proceso de divorcio y se reducen a dos las causales.

El abogado Miguel Garay indicó, por su parte, que se añadieron otras disposiciones que protegen los bienes de las personas durante procesos de embargo, se reducen algunos términos para acciones legales y se protege la intimidad de las personas en espacios como hoteles.

Ramón Guzmán, profesor de derecho civil en la Pontificia Universidad Católica en Ponce, al referirse a algunas de las críticas, como el proceso para aprobar la medida, resaltó que algunos de los códigos civiles más celebrados a nivel internacional, como el francés y el italiano, fueron creados en momentos extraordinarios, como la era de Napoleón Bonaparte y el mandato del fascista Benito Mussolini, respectivamente.

Durante el programa en WIPR, se resaltó que, en gran medida, lo que se trató de hacer con el nuevo Código Civil fue armonizar la ley con las interpretaciones de los tribunales con un lenguaje sencillo, fácil de entender para cualquier persona, no solo los abogados.

De hecho, la gobernadora indicó que, debido a que muchas de las nuevas disposiciones ya se habían adoptado porque eran parte de la jurisprudencia, no hay necesidad de extender la puesta en marcha del estatuto más allá de los 180 días que se dispone en la legislación.