En los últimos 10 días la tasa de positividad por pruebas de SARS-Cov-2 se han elevado en Puerto Rico de un 8.1% a un 18.4%, mientras que las hospitalizaciones por la enfermedad del COVID-19 se han triplicado, un asunto que el gobernador Pedro Pierluisi reconoce al señalar que hay vigilancia por parte del gobierno para aplicar “las restricciones que sean necesarias”, incluyendo el retorno a uso de mascarillas en lugares cerrados.

Así lo indicó el Primer Ejecutivo a Primera Hora al reiterar agradecimiento a las recomendaciones que desde hace más de una semana han hecho los miembros de la Coalición Científica que lo asesoran en la toma de decisiones alusivas al manejo de la pandemia.

“Nos mantenemos vigilantes y el Departamento de Salud, según su Orden Administrativa vigente, estará aplicando las restricciones que sean necesarias, tales como exigir mascarillas en actividades multitudinarias”, sostuvo Pierluisi en declaraciones escritas.

Aun cuando las hospitalizaciones por COVID-19 han aumentado de 41 (9 pediátricos) a 99 ingresos (34 pediátricos), el gobernador entiende que los números se mantienen “bajo control”.

“Afortunadamente, nuestros hospitales están totalmente bajo control y con amplia capacidad para atender a nuestra ciudadanía”, puntualizó al hacer hincapié en que las autoridades salubristas se mantienen observando el escenario.

“Ciertamente estamos viendo un repunte de casos sostenido, por lo que insistimos en nuestras recomendaciones a nuestro pueblo de tomar las medidas de protección individual que ya todos conocemos: el uso de mascarillas, el distanciamiento, el lavado de manos, así como realizarse pruebas diagnósticas y aislarse de tener síntomas”, agregó el gobernador al agradecer la colaboración de la Coalición para analizar los datos de la pandemia científicamente.

Desde la primera semana de abril la doctora Kenira Thompson, copresidenta de la Coalición Científica, recomendó al gobernador retornar al uso obligatorio de mascarillas en espacios cerrados para prevenir otro azote de la enfermedad similar al que se experimentó en Navidades con la llegada de Ómicron.

Además, resaltó el hecho de que el sublinaje BA.2 de Ómicron - el cual es más transmisible que cualquier otra variante detectada durante los más de dos años de pandemia- esté predominando en la isla con sobre un 60% de los casos secuenciados por vigilancia genómica.

La urgencia de la Coalición es proteger a los grupos más vulnerables, incluyendo a los niños menores de cinco años que aún no son aptos para vacunarse, así como a los demográficos de 60 años o más, los que han sido impactados de manera inclemente con una enfermedad más severa y en mortalidad. El 75% de las 4,184 defunciones vinculadas al COVID-19 en la isla corresponden a personas mayores de 60 años.

La Coalición explicó que el uso de mascarillas será recomendado bajo cualquiera de los tres niveles para Transporte Público tales como: Aeropuertos, Puertos Marítimos, Tren Urbano, Ómnibus (AMA), Guaguas (pisicorre), Taxi, Carros Públicos y Uber. Además, instan que el cubre boca y nariz debe continuar como requisito en las siguientes facilidades: centros de cuidado prolongado; facilidades de poblaciones que viven agrupados como cárceles o albergues; y facilidades de salud, de educación pública y privada a todos los niveles.

En cambio, puntualizaron que el uso de mascarillas, así como el requerimiento de evidencia de vacunación debe hacerse obligatorio en eventos de más de 1,000 personas. “Para eventos en espacios abiertos en caso de que no se pueda asegurar el distanciamiento físico entre núcleos familiares se recomienda el uso de mascarillas durante el evento. Eventos al aire libre de más de 500 personas deben ser evaluados por el Departamento de Salud”, determinaron.

En cuando al aforo en restaurantes y locales para eventos, la recomendación es permanecer con flexibilizaciones que se permitieron desde el pasado 7 de marzo cuando el Primer Ejecutivo eliminó el mandato de mascarillas en espacios cerrados y abiertos, al tiempo que dejó sin efecto las restricciones y disposiciones de cernimiento sobre el estatus de pruebas o vacunación en comercios y agencias gubernamentales.

En cuanto a vacunación, el grupo científico entiende que deben mantenerse los mandatos mediante Orden Ejecutiva u Orden Administrativa, al menos, para los siguientes grupos: todos los empleados que proveen servicios en facilidades de salud, todos los trabajadores esenciales, todos los trabajadores de facilidades con ambientes congregados (hogares, albergues, cárceles, etc.), empleados y contratistas gubernamentales, sector educativo, personas que trabajen en hoteles, hospederías, paradores, restaurantes, barras, chinchorros, cafetines, cafeterías, “sportbars”, teatros, cines, coliseos, centros de convenciones y actividades y entre estudiantes de 5 años en adelante.

“Los mandatos de vacunación escolar y universitaria a personal docente, no docente, contratistas y estudiantes son la herramienta más importante para mantener abierto el sistema educativo. Por lo tanto, se deben mantener de 5 años en adelante. Según las vacunas tengan autorización final deben incorporarse a la Ley 25 de 1983 de vacunación escolar. Recomendamos integrar en los requisitos de vacunación la vacuna contra COVID-19 para estudiantes mayores de 16 años según lo dispuesto en la Ley 25 de Inmunización de Puerto Rico,” expresó el pediatra Víctor Ramos, miembro de este grupo de científicos.

La Coalición resaltó que, gracias a las medidas de salud pública y el énfasis en la vacunación con las dosis de refuerzo, se observó una disminución en las tasas de casos, hospitalizaciones y muertes. “Las tasas de mortalidad claramente reflejan el impacto beneficioso de la vacunación con la 3ra dosis o booster”, sostuvieron.

Además, explicaron que la infección por SARS-CoV-2 tanto en personas vacunadas como no vacunadas, induce un grado de inmunidad por un tiempo limitado en los no vacunados y un tiempo más prolongado en los vacunados. “Aunque los datos de Puerto Rico están en proceso de análisis, para este aspecto, la alta tasa de infecciones en el reciente repunte de Ómicron puede haber aportado a inmunidad adicional en la población, al menos por 3-4 meses”, manifestó el grupo.

Según datos provistos a Primera Hora la semana pasada, de los 2.6 millones de personas que han completado la serie primaria de vacunación, hay 958,726 que son elegibles para el primer “booster” y 719,235 para el segundo “booster”. En cambio, en una semana de aprobación de este segundo refuerzo, solo se han administrado la vacuna 4,324 personas (0.6%).