El gobernador Pedro Pierluisi evadió este martes opinar sobre la controversia surgida ante la construcción de una piscina en el condominio Sol y Playa, en Rincón, así como rechazó que haya surgido una presión indebida desde La Fortaleza para que los permisos otorgados para realizar la obra en una alegada zona marítimo terrestre se les haya concedido.

Lo primero que dejó claro el mandatario, tras participar de los actos para recordar el natalicio del padre de la estatidad, José Celso Barbosa, que se realizaron en el cementerio María Magdalena de Pazzis, en el Viejo San Juan, es que su hermano no tiene apartamento en el mencionado condominio.

“Estás hablando de un primo tercero, cuarto mío”, estipuló cuando Primera Hora indagó sobre si algún familiar suyo residía allí.

De inmediato, soltó que “como dije, el permiso para que esa obra se llevara a cabo se emitió mucho antes de yo ser gobernador. Eso no tiene absolutamente nada que ver con eso. Además, como acabo de expresar, es mi política pública que en La Fortaleza nosotros no intervenimos en decisiones de este tipo, que son decisiones relacionadas a permisos, adjudicaciones pendientes en las agencias. Yo fui secretario de Justicia. Yo respeto la jurisdicción de las agencias, particularmente en asunto en que tu tiene intereses encontrados”.

Pierluisi dejó la controversia en manos del secretario del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Rafael Machargo.

“Es al secretario al que le tienen que hacer las preguntas en cuanto a sus propias decisiones, no a este servidor”, puntualizó.

De paso, pidió tanto al DRNA como a la Junta de Planificación, que evalúan la validez de los permisos para permitir al condominio construir una verja y una piscina frente al mar, que tengan celeridad en las investigaciones que realizan.

“Si me pides a mí que yo determine aquí si el permiso procede o no, sería una irresponsabilidad de mi parte tomar una decisión sobre eso, porque es un asunto que conlleva peritaje, que se está adjudicando tanto en el DRNA, como en la Junta de Planificación, y yo soy el primero que respeto a las agencias reguladoras. Lo único que les pido y en esta ocasión más que en cualquier otra, que actúen con celeridad. Que acabe el asunto”, manifestó.

Cuando se le preguntó sobre el tiempo en que espera que las investigaciones hayan concluido, Pierluisi estipuló que para la próxima semana. Es que informó que la Junta de Planificación ya le adelantó que la pesquisa está adelantada, mientras que el DRNA tendrá una vista el próximo 4 de agosto.

“Ese permiso se otorgó mucho antes que yo fuera gobernador. Ahora está siendo cuestionado. Lo importante es que tanto el DRNA como la Junta de Planificación tomen cartas en este asunto con celeridad, con sentido de urgencia. Eso es lo que yo le estoy pidiendo para evitar la controversia”, insistió.

Por otro lado, Pierluisi negó se hayan registrado casos de uso de excesiva fuerza policiaca en las manifestaciones que se realizan en los predios del condominio en Rincón.

“Si se somete cualquier querella, se va a investigar. Pero la policía ha estado haciendo su trabajo”, puntualizó.

El condominio Sol y Playa se construyó hace 24 años. Allí habían dos piscinas, dos gazebos y una verja, que se fueron con el devastador paso del huracán María. Los residentes han solicitado permisos para edificar su verja de seguridad y en los predios que le quedarían disponible construir una sola piscina.

El comienzo de la obra de construcción de la verja ha ocasionado una protesta permanente en la zona.

Debido a que se han sentido amenazados, los residentes determinaron el pasado sábado detener la construcción. Sin embargo, la acción no ha detenido las manifestaciones.

Los manifestantes, por su parte, aluden a que el área en la que se pretende hacer la construcción es parte de la playa y que la playa le pertenece al pueblo. Insisten, además, en que la zona es área de anidaje de tinglar y carey. De hecho, en el área de la construcción quedó hace poco una de estas tortugas atrapada en el proceso de anidar.