Como el “cuento de nunca acabar” describió Eduardo Cardona, presidente de la Asociación de Funerarias de Puerto Rico, el ataponamiento de cadáveres que el Instituto de Ciencias Forenses (ICF) denunció tener en sus instalaciones.

La agencia apuntó ayer, martes, a que un total de 61 cadáveres estaban ya listos para ser recogidos por agentes funerarios, sin ningún tipo de trámite pendiente, pero permanecían allí.

“Un caso terminado no tiene trámites ante el ICF. No se justifica su permanencia en el Instituto”, indicó la institución en declaraciones escritas.

Menos de 24 horas después de la denuncia, la oficial de prensa del ICF, Betsy Rivera, confirmó a Primera Hora que unos 20 cadáveres ya habían sido recogidos, por lo que el número total de casos en espera se sitúa ahora en 41.

Pese a que el Instituto de Ciencias Forenses apuntó a que los cadáveres en espera ya tienen toda la documentación completada, Cardona dijo que entiende que la tardanza en el recogido de cadáveres surge de la problemática que desencadenan los días festivos concedidos en medio de las fiestas navideñas.

“La situación de tantos días festivos crea el problema de que el Registro Demográfico entonces no trabaja. Que no se pueden entonces sacar los permisos como uno desearía, tanto de cremaciones como de enterramiento. Sin contar los cementerios. Al haber días feriados, también los cementerios dejan de trabajar, y eso es lo que crea esta retraso”, dijo a este diario el también propietario de la Funeraria Cardona.

Según expresó, si un cementerio municipal no estaba operando durante los pasados días, el funerario quizá opta por retrasar el recogido del cadáver en el ICF porque no necesariamente cuenta con la cantidad de neveras que requeriría mantener el nuevo cádaver y los que ya tenía en sus instalaciones.

“En San Juan todos los cementerios son básicamente, municipales. No estuvieron trabajando. Entonces, muchos funerarios se ven con la situación de que a lo mejor, no lo pueden recoger (el cadáver) a tiempo porque quizá no cuentan con las neveras (para mantener el cuerpo antes de enterrarlo) o no tienen todos los permisos al día”, precisó.

Cadona también apuntó a que aún cuando estén listos todos los permisos y no haya problemas de neveras en la funeraria elegida, otro factor que puede estar retrasando el recogido de cadáveres puede estar relacionado a los trámites que debe realizar la familia de los fallecidos con la funeraria.

“A veces dependemos de la familia. Me explico, una familia puede decir que la funeraria tal es la que tiene los servicios, pero si no se ha completado el contrato o los acuerdos, pues la funeraria tampoco está en la obligación de realizar el servicio”, mencionó.

Cardona, no obstante, precisó que entiende que en los próximos días, tras haber culminado la época festiva, debe regularse la problemática.

“Nosotros agradecemos la respuesta de los funerarios. Seguimos trabajando para que la gente pueda tener ese encuentro con su familiar bajo la disposición que hayan elegido”, dijo por su parte Rivera.

En septiembre de 2022 el ICF denunció una situación similar en sus instalaciones. Entonces, la problemática estuvo relacionada a los inconvenientes generados tras el apagón general, las inundaciones y los estragos causados por el huracán Fiona. Diversas funerarias optaron por realizar entierros rápidos para frenar la problemática.