Finalizan restricciones en la bahía bioluminiscente de Vieques en Puerto Rico
El problema de reducción de bioluminiscencia en Vieques comenzó en enero pasado y se asoció al fuerte oleaje, falta de lluvia y las marejadas características de esa época del año.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 10 años.
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San Juan.- Las restricciones que durante meses limitaron el acceso a la Bahía Bioluminiscente de Mosquito, situada en la pequeña isla de Vieques, frente a la costa este de Puerto Rico, finalizan mañana una vez recuperada la luminosidad de esta atracción turística.
La secretaria del Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), Carmen Guerrero Pérez, anunció hoy a través de un comunicado que la Bahía Bioluminiscente Mosquito de Vieques se encuentra en proceso de recuperación y que por ello se pone fin a la moratoria que limitó durante los últimos meses el acceso los fines de semana.
El problema de reducción de bioluminiscencia en Vieques comenzó en enero pasado y se asoció al fuerte oleaje, falta de lluvia y las marejadas características de esa época del año.
Entonces se registró una bajada en los niveles habituales de dinoflagelados, que son los microorganismos que reaccionan al movimiento iluminándose y provocan así la bioluminiscencia del agua.
"La poca precipitación y la falta de nutrientes provocaron la disminución de bioluminiscencia. Sin la lluvia, no llegan a la bahía los nutrientes de los cuales se alimentan los dinoflagelados que producen el fascinante efecto de iluminación y que han hecho que la bahía sea una de las más reconocidas a nivel internacional", indicó Guerrero Pérez.
En enero de 2014 se reportaron densidades de 200 dinoflagelados por litro de agua, mientras que en mayo de 2014 subieron a 352 y en junio a 768.
Los estudios científicos se basaron en el conteo de dinoflagelados (microorganismos que producen la bioluminiscencia), análisis de la calidad del agua, esto es temperatura, oxígeno disuelto y salinidad (PH) y la cantidad de nitratos y nitritos, clorofila y el impacto humano.
Los vigilantes continuarán el control preventivo por el área para asegurar que el uso y disfrute de la bahía sea de acuerdo a las disposiciones de ley, incluyendo a visitantes y concesionarios.