El exgobernador Rafael Hernández Colón falleció hoy, jueves, a los 82 años, confirmaron hoy el hijo del exmandatario, Juan Eugenio Hernández Mayoral y el alcalde de Isabela, Charlie Delgado. 

Asimismo, mediante comunicado de prensa, la familia Hernández Mayoral ofreció detalles de las exequias que publicamos a continuación: "La Familia Hernández Mayoral le comunican muy entristecidos al Pueblo de Puerto Rico que luego de 82 años nuestro querido Padre ha fallecido.

Rafael Hernández Colón fue un hombre incansable al servicio de los demás. Faro de sabiduría para nuestra familia y nuestro Pueblo. Su fe inquebrantable le brindaba fortaleza y valentía en tiempos de decisiones difíciles. Su alto sentido del deber, anclado en el amor a Dios y en la rigurosidad con el estudio del Derecho, le brindaban las herramientas para poner en marcha su entrega por Puerto Rico. Nos dejó un legado de generosidad y rectitud, que vivirá para siempre en nuestros corazones.

Siguiendo las instrucciones que nos dejó relativas a su muerte le comunicamos al Pueblo de Puerto Rico que a partir de mañana a las 9:00 a.m. se expondrá en El Capitolio y luego se celebrará una santa misa en La Catedral de San Juan a la 12:00 p.m. Luego de la misa se detendrá brevemente frente a la sede del Partido Popular. A las 6:00 p.m. se expondrá en su Biblioteca Gubernatorial en la Ciudad Señorial hasta las 11:00 p.m. El sábado continuara el velatorio en la Biblioteca que lleva su nombre desde las 9:00 a.m. y luego se celebrará una santa misa en La Catedral de Ponce a la 12:00 p.m. Luego de la misa partirá hacia el camposanto donde se llevara acabo los actos fúnebres familiarmente".

El reconocido líder del Partido Popular Democrático (PPD) padecía de leucemia. 

Fue el viernes, 23 de noviembre que trascendió la noticia de que el exgobernador había sido recluido en el Hospital Municipal de San Juan, ubicado en el Centro Médico de Río Piedras, para ser diagnosticado. Allí fue estabilizado y trasladado a Estados Unidos para recibir tratamiento. . Luego regresó a la Isla.

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Su última aparición pública fue durante el velatorio del presidente del PPD, Héctor Ferrer, quien falleció el 5 de noviembre víctima de cáncer.

Hernández Colón nació en Ponce el 24 de octubre de 1936. Fue el mayor de los tres hijos de Rafael Hernández Matos y Dora Colón Clavell.

Estudió en la escuela Rafael Pujals y en el Colegio Ponceño de Varones en Ponce, pero obtuvo su diploma de cuarto año en el Valley Forge Military Academy, en Wayne, Pennsylvania.

Permaneció en Estados Unidos durante su juventud, donde obtuvo con honores un bachillerato en Ciencias Políticas de la Universidad Johns Hopkins University, en Baltimore, Maryland, en 1956. Posteriormente, se licenció en derecho en el 1959 en la Escuela de Derecho en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras.

Tras graduarse, Hernández Colón litigó a nivel estatal y federal. Además, se casó el 24 de octubre de 1959 con Lila Mayoral Wirshing, con quien tuvo cuatro hijos: Rafael, José Alfredo, Dora Mercedes y Juan Eugenio. 

Fue en el 1960 que el líder popular entró al servicio público. Inició como comisionado asociado de la Comisión de Servicio Público. También fue entre 1961 y 1965 profesor de Derecho Procesal Civil en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico.

En el 1965 fue nombrado secretario de Justicia por el gobernador Roberto Sánchez Vilella. Luego, en el 1968, logró su primer puesto electivo. Fue escogido en esas elecciones senador por el PPD. 

Al asumir el cargo, en enero de 1969, Hernández Colón fue escogido por sus pares como presidente del Senado. Ya para cuando finalizó ese año ocupaba por primera vez la presidencia de la Pava. Este cargo lo asumió por 23 años corridos.

Un solo cuatrienio en la Legislatura le bastó para ganarse el favor del electorado y convertirse en las elecciones de 1972 en el primer gobernador electo de menor edad en la Isla. Para ese entonces, tenía 36 años. 

Hernández Colón, reconocido por el eslogan de campaña: “Gallito que no se juye”, perdió los comicios del 1976 y del 1980 frente al estadista Carlos Romero Barceló. Sin embargo, regresó triunfante a La Fortaleza en las elecciones del 1984 y 1988. 

“Logró del establecimiento de la Sección 936 al Código de Rentas Internas de Estados Unidos para fomentar el desarrollo industrial de Puerto Rico ofreciendo incentivos contributivos a industrias que se establecieran en la isla. Sus efectos al desarrollo económico del país han sido altamente visibles, sobre todo en el área de las farmacéuticas”, añade el documento.

Además, Hernández Colón se destacó por “la adquisición de la red telefónica por el Gobierno y la modernización de este servicio en el país, así como la también adquisición por el Gobierno de la red de transporte marítimo para estabilizar los fletes marítimos en Puerto Rico demuestran el alcance de la autonomía fiscal con que cuenta el país”.

“Estableció reformas significativas en lo educativo, jurídico, contributivo y municipal; fomentó la participación democrática del pueblo en los asuntos políticos del país y creó vías para afirmar la identidad cultural puertorriqueña, dando primacía al establecimiento por ley del español como idioma oficial de Puerto Rico”, destaca la biografía. 

El exgobernador también se destacó por propulsar la descentralización en el gobierno, la cual dio paso a la Ley de Municipios Autónomos de 1991. 

Además, Hernández Colón encausó en sus tres cuatrienios como gobernador iniciativas y proyectos de ley a favor de la mujer. Entre estas se destacó la aprobación de la Ley 54 para la Prevención e Intervención con la Violencia Doméstica.

En términos de status, logró que “el presidente Richard M. Nixon nombrara el Comité Ad Hoc para el Desarrollo del Estado Libre Asociado en 1973 y participó en la redacción del Pacto de Unión Permanente entre Puerto Rico y Estados Unidos, conocido como El Nuevo Pacto, en 1975. En 1979 desarrolló un plan estratégico para el desarrollo integral de Puerto Rico llamado La Nueva Tesis”.

De sus años en La Fortaleza, el exgobernador solo ha dicho haberse arrepentido de convocar en el 1991 el referéndum del Sí o No para aprobar la ley de derechos democráticos. 

“Lo hice por malas razones. Se dio una oposición de los propios populares a que se llevaran a cabo las enmiendas constitucionales, con dos terceras partes de los votos… Fue un error, el pueblo vota, pero no se enmendaba la Constitución. Lo hice por la presión del partido”, expresó a Primera Hora el pasado año.

Hernández Colón se retiró del proceso electoral al concluir el año 1992. Sin embargo, continuó activo en el PPD. Asistía a la Junta de Gobierno y eventos políticos. Se le reconocía como una voz importante dentro de la Pava.

Hernández Colón recibía en la actualidad una pensión de $25,000 anuales de exgobernador, se mantenía activo impartiendo clases de derecho y recibía el servicio de escolta, un asunto que defendió hasta en los tribunales. 

En su trayectoria, publicó varios libros. Entre estos están “Derecho Procesal Civil”, “Procedimiento Civil, Trayectoria Histórica de la Autonomía Política Puertoriqueña” y “Nueva Tesis”.

Por otro lado, Hernández Colón enviudó el 7 de enero de 2003. Su esposa y exprimera dama, Lila Mayoral, murió víctima del cáncer. Se volvió a casar a finales de 2004 con la abogada Nelsa López, con quien residía en la actualidad en Ponce. 

Como legado, el exgobernador deja la Fundación Biblioteca Rafael Hernández Colón, “una organización sin fines de lucro establecida en 1992 con el propósito de fomentar el interés en la investigación, el estudio, análisis y reflexión sobre la realidad del pueblo puertorriqueño”.