Hasta en el lejano Japón se dejó sentir el rechazo a Ricardo Rosselló.

Roberto Negrón, un profesor puertorriqueño que vive en la central ciudad de Kioto, no dudó en preparar sus pancartas, empuñar su bandera de Puerto Rico y unirse al pedido mundial para que el gobernador de Puerto Rico abandone la Fortaleza.

“Todos estamos muy ansiosos. Queremos que (Rosselló) renuncie lo más pronto posible; es lo mejor para todos, para que podamos seguir luchando por el Puerto Rico que queremos para nosotros y para las próximas generaciones”, manifestó Negrón a Primera Hora en comunicación escrita desde Japón.

Natural de Corozal, pero residente desde hace más de 20 años en Japón, Negrón llegó el jueves con su hijo Darío a la principal estación del tren de Kioto y se detuvo en silencio mientras mostraba las cartulinas que preparó en su casa.

Uno de los letreros leía: “Desde Kyoto Japón, renunia (sic) Ricardo Rosselló. Sayonara (adiós, en japonés)” y el segundo cartelón representaba un “haiku”, o poema corto típico japonés, pero escrito en español, que leía: “En Japón, pero con mi tierra en el corazón”.

“Hasta me comí la ‘n’ de renuncia. Ahora no va a llegar el mensaje”, se vaciló el propio Negrón.

 “Creo que mucha gente reconoce la bandera de Puerto Rico… Los que se paraban a leer eran turistas hispanoparlantes”, manifestó Negrón, quien intentaba explicar a los curiosos su manifestación.

El boricua se mantuvo poco más de media hora en la estación debido a la lluvia que cayó esa mañana en el centro de Japón. Y a pesar de que no contaba con nadie más en su protesta, ya que no conoce de otros boricuas que vivan en Kioto, entiende que el mensaje llegó.

“No estaba ni me sentía solo. Estaba con todos y cada uno de los puertorriqueños que marchan en la Isla y en varias partes del mundo día a día para exigir la renuncia del gobernador”, sentenció.

La manifestación de Negrón se unió a la de miles de boricuas que se han expresado en otros países España, Canadá, Italia, Holanda, Estonia, Egipto y distintas ciudades en Estados unidos, así como los decenas de miles que llegaron la tarde y noche del miércoles a la Isleta de Viejo San Juan exigiendo la salida del gobernador de La Fortaleza.