La Asociación de Empleados Municipales presentó una demanda contra el municipio de Ponce, por el establecimiento de un plan de horario inflexible que impide tener un segundo empleo y hasta estudiar.

El grupo afiliado a la United Steelworkers-Ponce sometió el Injunction ante el Tribunal de Primera Instancia de Ponce a través de su abogado, César Rosado.

La portavoz de los empleados, Mayra Rivera Nazario, el representante de la USW en Puerto Rico, Yaphet Torres, y la Secretaria Financiera de la Asociación, Doralis Vázquez Martínez, sometieron la demanda por las nuevas directrices impartidas con respecto al Plan de Jornada que comenzó el pasado 7 de agosto donde se elimina el “flexitime” que bajo la Ordenanza #74 proveía para que se pudiese laborar el tiempo ya reducido a 20 y 30 horas en períodos de dos días y medio y cuatro días, respectivamente.

Además, el grupo urgió el pago del exceso por concepto de la Licencia por Enfermedad, mejor conocida como el "enfermito" y el pago de las remesas a diferentes entidades gubernamentales y privadas, como por ejemplo Sistemas de Retiro, AEELA, Plan Médico, Hipotecas y ASUME.

En la demanda se establece que el 30 de mayo de 2014 el Municipio de Ponce aprobó la Ordenanza Núm. 74 (Serie 2013-2014), para imponer la Ordenanza Núm. 58 (Serie 2005-2006) que redujo la jornada laboral de sus empleados municipales.

Ante la reducción de la jornada laboral de sus empleados, el mismo 30 de mayo de 2014, el Municipio de Ponce también aprobó la Ordenanza Núm. 76 (Serie 2013-2014), que concedió “un crédito contra la patente correspondiente al año fiscal 2015-2016 a toda persona que otorgue empleo o contrate a empleados municipales cuya jornada laboral haya sido reducida”.

“Ante la aprobación de tales Ordenanzas, a los empleados y empleadas municipales se le establecieron nuevos horarios de trabajo dejándole algunos días de la semana libres, procurando que cumplieran hasta 7.5 horas diarias pero nunca en exceso de 20 horas semanales y que, a su vez, los servicios que brinda la municipalidad no se afectaran”, alega la demanda.

"A esos efectos y cónsono con tales ordenanzas, los empleados y empleadas municipales se dieron a la tarea de conseguir trabajos parciales en distintas empresas con el fin de equiparar y nivelar sus ingresos ante la reducción de la jornada laboral sufrida, la cual significó una merma significativa en sus salarios", indica la demanda.

Por su parte, la alcaldesa reaccionó a esta situación con declaraciones escritas, en las que dice lo siguiente:

"Nosotros nos reunimos con la presidenta de la United Steel Workers, Mayra Rivera y ya nuestro comité ejecutivo está atendiendo sus inquietudes. La próxima semana les dejaremos saber sobre las decisiones que hemos tomado al respecto. Si a pesar de escucharlos insisten en demandar pues ya eso es discreción de ellos. Nosotros estamos dispuestos a recibir propuestas y evaluarlas siempre velando por el bienestar del pueblo y de los servidores públicos".