Unos 12 electores que votaron por correo, pero que cuyas direcciones físicas no concordaban con el registro electoral, demandaron a la Comisión Estatal de Elecciones (CEE) para hacer valer sus sufragios.

La comisionada electoral del Partido Popular Democrático (PPD), Karla Angleró González, había explicado a Primera Hora que la decisión de no contar votos cuyas direcciones no se pueden validar fue una determinación “final y firme” de la Comisión y una unánime entre los comisionados electorales.

Es por esto que, al comienzo del escrutinio general- que se lleva a cabo en el Centro de Operaciones de la CEE, en Hato Rey-, la presidenta alterna de la agencia, Jessika Padilla Rivera, sugirió que aquel comisionado electoral que ahora esté en desacuerdo a que acudiera a los tribunales para impugnar esa decisión.

Relacionadas

Aunque el comisionado electoral del Partido Nuevo Progresista (PNP), Aníbal Vega Borges, advirtió que así lo haría, fueron los mismos electores quienes demandaron.

Según reportó el diario El Nuevo Día, las personas aducen que no se les puede exigir una validación adicional de identidad, ya que la CEE había acordado permitir el envío de papeletas de voto por correo a direcciones distintas de las que aparecen en el registro electoral confiando en que ese elector sería contactado para verificar su identidad.

Los demandantes dijeron desconocer que su voto estaba condicionado pendiente de validación y negaron haber recibido una llamada para así validar su identidad, reportó el periódico.