Las posibilidades de utilizar la antigua Penitenciaría Estatal de Río Piedras, mejor conocida como el Oso Blanco, para establecer allí operaciones del Fideicomiso de Ciencia y Tecnología y de la Ciudad de las Ciencias lucen cada vez más remotas, según expresiones que hizo hoy, miércoles, el gobernador Alejandro García Padilla sobre las condiciones de dicho inmueble.

 El gobernador sostuvo que se está haciendo otro estudio estructural, pero opinó que la estructura del Oso Blanco está muy afectada. Expresó, sin embargo, que no se quiere tomar una decisión apresurada sobre el futuro de la antigua estructura.

“Lo que nos han dicho los expertos, los ingenieros estructurales, es que para remover asbesto y el plomo, hubo que ponerle soportes a las paredes para que no se derrumbaran encima de los obreros. Así de comprometida está esa estructura”, indicó García Padilla.

Agregó que la información que se le ha ofrecido es que hay vigas y paredes que estaban siendo sostenidas por los marcos de las celdas, que al quitar el acero del marco se temía que se derrumbara la pared.

 “Estamos esperando el estudio, pero todo aparenta que está muy, muy, comprometido”, sostuvo el gobernador.

Expresó, por otra parte, que las celdas del Oso Blanco eran muy pequeñas y que ampliar esos espacios resultará muy difícil.

 “Es una instalación que fue construida en la década del treinta para los requisitos, que eran casi ninguno, de la cohabitación de confinados. Eran celdas para dos personas donde, de acuerdo a las regulaciones actuales, ni siquiera podría haber ahora una persona. Es muy pequeña y están separadas por paredes muy gruesas de hormigón. Por lo tanto, ampliar los espacios es prácticamente imposible, además que está muy comprometido”, reiteró.