Después de más de un año sin tener contacto físico o cercano con sus familiares, a partir de hoy 75 menores que residen en instituciones juveniles podrán ver a sus seres queridos con la reanudación de visitas de los dos Centros de Tratamiento Social del Departamento de Corrección y Rehabilitación, ubicados en Villalba y Ponce.

Así lo informó la secretaria designada de la agencia, Ana Escobar, al hacer énfasis sobre la importancia que representa en términos de rehabilitación de los menores transgresores -cuyas edades fluctúan entre los 15 y 20 años- mantener contacto afectivo con sus parientes.

“Es demasiado el tiempo que llevan sin verse... creo que nosotros nos emocionamos igual o más que ellos mismos. A ellos les hace falta que se vean y se comuniquen. Que se expresen sus emociones frente a frente”, manifestó la funcionaria al agregar que los jóvenes dejaron de recibir visitas desde marzo de 2020 cuando inició la pandemia del COVID-19 y el gobierno decretó medidas restrictivas para prevenir infecciones del virus.

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Escobar resaltó que la reanudación de las visitas se da en un estricto marco de protocolo para prevenir contagios del COVID-19.

Especificó que las visitas se realizarán mediante citas previas y serán supervisadas por un trabajador social. Tendrán una visita semanal de una hora y se admitirán tres familiares por menor.

Los horarios de visita son de 8:00 a.m. a 3:00 p.m. los viernes y sábados y se incluirá domingo de ser requerido. Todo menor transgresor que no se ha vacunado utilizará durante la visita artículos de protección adicional entiéndase bata de protección, mascarilla quirúrgica o KN 95, Face sheild, guantes y cualquier otro equipo que se necesario. A los familiares también se les requerirá mascarillas (no se permitirán de tela). Tampoco se aceptarán paquetes.

“Esto es algo que hemos coordinado durante un mes y sabemos que hay mucha emoción envuelta porque, aunque ellos tenían llamadas por videoconferencia, no es lo mismo interactuar físicamente con tu ser querido”, expresó Escobar.

Sostuvo que los visitantes pasarán por un proceso de registro y completarán una entrevista de cernimiento de vigilancia de síntomas, que incluye un proceso de higienización de manos y toma de temperatura por parte del personal del Programa de Servicios de Salud Correccional. De presentar síntomas, no se permitirá la entrada.

Añadió que como medida preventiva el personal de enfermería de cada centro, realizará pruebas de antígeno a los visitantes y de resultar negativo procederán a dar entrada al centro. De arrojar positivo, no se permitirá la entrada del visitante. Las pruebas serán provistas por el Departamento de Salud en coordinación con Physician Correctional.

Por otro lado, informó que el DCR ubicó en el área de las visitas en todos Centros de Tratamiento Social módulos con acrílicos para garantizar el distanciamiento y evitar el contacto físico. Además, personal del DCR limpiará y desinfectará el cubículo de visita antes y después de cada visita.

¿Qué ocurrirá con las visitas en las cárceles de adultos?

A preguntas de Primera Hora la secretaria expresó que la reanudación de visitas de la población correccional adulta está bajo evaluación y se observará el comportamiento en las instituciones juveniles para establecer estrategias.

“Vamos a estar monitoreando qué pasará durante este fin de semana para tomar decisiones con relación a la población de adultos, de forma que se puedan ir reanudando las visitas de forma gradual. Sin embargo, hay que tomar en consideración que hay un repunte de casos y eso tamibén lo estamos monitoreando con asesoría y orientación de infectólogos y epidemiólogos”, planteó.

Actualmente, la agencia maneja 15 casos activos de COVID-19 en el centro de ingreso de la cárcel de Bayamón. Mientras se informó que el 92% de los confinados y el 95% de los empleados fueron vacunados.

“A todos se les ha dado la oportunidad de vacunarse. Seguimos orientando y educando para que los que faltan se vacunen”, se expresó a este diario por declaración escrita.