Representantes de la Unión General de Trabajadores (UGT), de la Administración de Servicios Médicos (ASEM) y del Departamento de Salud se encontraban desde la mañana de este jueves reunidos en el Departamento del Trabajo para intentar dar con una solución que pueda detener el paro indefinido que impactaría la operación en el Centro Médico de Río Piedras.

A eso de la 1:00 p.m., el secretario del Trabajo, Gabriel Maldonado González, afirmó en una conferencia de prensa que las negociaciones continuaban. No dio detalles sobre si existía o no una propuesta definitiva que evite el paro de la UGT, el cual inicia a las 12:01 a.m. de mañana, viernes, pero dijo que “las partes están en la mesa negociado. En ese sentido, no ha cambiado nada el tema del paro de mañana, por ahora”.

Sin embargo, poco después las partes se marcharon del Departamento del Trabajo y se desconoce si la negociación continuará posteriormente.

Aunque al inicio del conclave a las 9:00 a.m. ninguno de los altos funcionarios de estos entes, entiéndase el presidente de la UGT, Edwin Méndez; el director de ASEM, Jorge Matta, y el secretario de Salud, Carlos Mellado, estaban presentes, a eso de las 11:30 a.m. se confirmó que el líder sindical y Matta llegaron al encuentro.

Este diario supo que el secretario de la agencia, Gabriel Maldonado González, lideraba la reunión con el presidente de la UGT y Matta.

Vanessa Ramos, quien es portavoz del comité negociador de la UGT, informó que hasta el mediodía no había ninguna propuesta nueva sobre la mesa.

Méndez concedió una entrevista telefónica a Primera Hora previo al encuentro en la que hizo constar que “si no hay nada diferente a lo que actualmente tenemos, pues no valdría la pena ir a la reunión”.

Detalló que como presidente de la UGT está enfocado en prepararse para el paro indefinido en el Centro Médico de Río Piedras, el cual iniciaría a las 12:01 a.m. de mañana, viernes. Hizo constar que este paro se decretó por supuestas “prácticas ilícitas” del patrono, ya que la unión le presentó una propuesta de aumento salarial de $2,000 y en vez de sentarse a la mesa de negociación acudieron a la Junta de Supervisión Fiscal a buscar una opinión.

“Entendemos fue un actuar de mala fe”, precisó.

El líder sindical dejó claro que si durante la reunión que se realizaba hoy en el Departamento del Trabajo sale a la mesa una buena propuesta y tiene que trasladarse a la sede en Hato Rey para comenzar las negociaciones, así lo haría.

Se le inquirió sobre cuál es la propuesta que detendría el paro indefinido, el cual afectaría al principal hospital del país. Hizo constar que ASEM pudiese mantener su oferta de un alza salarial porrateada de $800, pero que no se imponga como un bono por tres años, sino que se fije al salario de cada empleado.

“El tranque vino en la propuesta del patrono de los 800 dólares que ofrecieron como un bono por 36 meses, de manera prorrateada. El que recibió menos de $800 en el plan de retribución, pues recibiría esa cantidad prorrateada. O sea, si recibió $600, recibiría $200 nada más. Eso no va al salario. Ellos hacen mucho trabajo ‘overtime’, porque hay falta de personal. Tampoco le cuentan el ‘overtime’, porque es un bono. Y ellos querían que fuera salario y que fuera a todo el personal”, detalló Méndez.

Informó que si reciben una propuesta de aumento atada al salario base de cada empleado, determinarían cuándo reunir a su matrícula en asamblea y si detienen el paro propuesto.

La UGT tiene en el Centro Médico 975 unionados. Son, por ejemplo, enfermeros, enfermeros anestesistas, técnicos radiológicos, técnico clínico, cocineros, asistentes de Sala de Emergencias, terapia respiratoria, ingenieros y secretarias, entre otro personal unionado por la UGT. Estos laboran en las áreas de Sala de Emergencia, Sala de Operaciones, Recovery, Trauma, Endovascular, Servicios de Medicina Hiperbárica, Banco de Sangre, Clínicas externas, Cocina Central, entre otras áreas administrativas de ASEM, quien dirige el Centro Médico de Río Piedras.

Se le cuestionó a Méndez si a la UGT se le haría detener a cerca de 12 horas de su inicio.

Reiteró que “depende de lo que traigan” a la mesa de negociación.

Pero, hizo constar que, a estas alturas, “hay una desconfianza entre los empleados. Sabemos que todo convenio tiene que pasar la aprobación de la Junta de Supervisión Fiscal, pero ese es el problema, hay desconfianza en la administración, hay desconfianza en la Junta, y ya los empleados están cansados, están agotados. Ya ustedes vieron que el reclamo fue bastante, con la participación de 500 personas, 370 votaron en contra de esa propuesta (del bono de tres años)”.

Méndez insistió en que el reclamo principal es que el aumento esté atado al salario de cada empleado. Dijo que una medida como esta podría detener la fuga de talento hacia los Estados Unidos, principalmente de aquellos profesionales que llevan sobre 20 años de labor en el Centro Médico.

“Eso es lo que la matrícula está pidiendo, que ese dinero se ponga a salario, que sea para todo el mundo. Conocemos que hay una fuga de personal y el personal que no se impactó con el plan de retribución la mayoría llevan sobre 20 años de servicio. Son los que se están yendo, son los que tienen la experiencia, son los que adiestran a ese personal nuevo que llega, que no es fácil decir que se vayan, como dijeron en una entrevista, cuando el que viene no tiene la experiencia de trabajar en un hospital superterciario. Es el tope de la pirámide, donde todo lo que no atienden en los demás hospitales, se atiende ahí”, enfatizó Méndez.

En cuanto a la acción de ASEM, de ofrecer un salario triplicado a todo empleado que vaya a trabajar durante el paro, Méndez indicó que propicia “la confrontación”.

Denunció que “están reuniendo a los empleados aparte en la oficina de los supervisores ofreciéndole que brinque la fila y se le va a pagar triple. Hay comentarios de que están comunicándose con la compañía Cardona, que tiene empleados privados en el Hospital Universitario, para que entren a través del Hospital Universitario al Centro Médico. Nuevamente, hay para las privadas, pero no para el empleado. Eso no es sólo confrontación, eso es mayor molestar. Se supone que el empleado no entre, se supone que nadie entre a romper la huelga”.

Por otro lado, el secretario de Salud dijo a NotiUno 630 que el dinero de la paga triple saldría del plan de emergencia decretado ante la posibilidad de que ocurra el paro laboral.

“No podemos afectar el servicio. Y esto no es algo que se va a hacer por tres años ni por un año”, señaló, a modo de justificar el acto.

Comentó que este pago de emergencia es diferente a la propuesta de aumento salarial, ya que el impacto al presupuesto es de unos $100 millones.

“Estamos de la mejor fe del mundo en tratar de llegar a un acuerdo”, sentenció Mellado.