Los aspirantes a la gobernación por el Partido Nuevo Progresista, Pedro Pierluisi y Ricardo Rosselló, reaccionaron hoy, viernes, al borrador del proyecto legislativo que se cocina en el Congreso de Estados Unidos para atender la crisis fiscal de Puerto Rico y dejaron entrever que ambos se posicionan de manera diferente ante la posibilidad de que se cree una junta de control sobre las finanzas de la Isla. 

El comisionado residente en Washington, por una parte, destacó que la inclusión en el plan de una junta de supervisión temporera, que hasta el momento se perfila compuesta por cinco miembros seleccionados por el presidente estadounidense, es uno de los dos elementos esenciales para que la medida cuente con apoyo bipartita y pueda convertirse en ley.

Este grupo, según describió, “ayudará a instituir disciplina fiscal, aumentar la eficiencia y la transparencia gubernamental, llevar a cabo un rol importante en el proceso de reestructuración de deuda, y permitir que Puerto Rico recupere el acceso a los mercados de crédito bajo términos razonables”.

El otro elemento que mencionó como esencial es “un mecanismo judicial ordenado y justo” para hacer valer acuerdos de reestructuración de deuda entre entidades emisoras de bonos en Puerto Rico y sus acreedores”. 

“Soy uno de los pocos líderes en Puerto Rico que he estado articulando los beneficios potenciales para Puerto Rico que podría tener una junta de supervisión temporera e independiente. Estoy convencido de que la gran mayoría de nuestro pueblo entiende esos beneficios potenciales, aun cuando lamentan profundamente que Puerto Rico -como resultado del trato desigual que recibimos a nivel federal y el mal manejo de las finanzas públicas a nivel local- haya tenido que llegar al punto de que una junta como esta sea necesaria”, apuntó Pierluisi.

El comisionado subrayó que “para que la junta sea efectiva en lograr sus metas, tiene que tener dientes pero no colmillos”. 

Sin embargo, el aspirante Ricardo Rosselló consideró que la junta propuesta perpetuaría el estatus colonial de la Isla.

“Como está descrita, una junta de control fiscal bajo la cláusula territorial, provocará que el Estado Libre Asociado, que ha sido rechazado por el pueblo, se perpetúe en su forma más indignante. Cualquier propuesta de junta tiene que ser en el contexto de colaboración y trato como un Estado, no como una colonia”, expuso por escrito.

La idea que Rosselló ha presentado al Comité de Recursos Naturales de la cámara federal, según dijo, establece un modelo de cooperación entre el gobierno local y el gobierno federal en busca de promover el desarrollo económico y una ruta hacia la estadidad. 

El candidato novoprogresita añadió que “el Congreso no debe convertirse en cómplice del estatus colonial en contra de lo que quiere Puerto Rico. La junta de control fiscal no puede hacerse a costa de no resolver el estatus de Puerto Rico. Quien valide este tipo de arreglo, valida la colonia. La base de la solución propuesta es la discriminación por ser colonia”.

El gobernador Alejandro García Padilla reaccionó anoche al contenido del borrador estableciendo que no aceptaría una junta no electa por el pueblo.