Con dificultades financiera la oficina encargada de combatir la pobreza
La Oficina para el Desarrollo Socioeconómico y Comunitario estuvo meses sin fondos para poder llevar a cabo sus iniciativas
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 3 años.
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La oficina del gobierno que tiene como uno de sus propósitos esenciales combatir la pobreza ha enfrentado una carencia de fondos que le ha dificultado llevar a cabo su labor, según trascendió en una vista pública senatorial en la que compareció la directora ejecutiva de la Oficina para el Desarrollo Socioeconómico y Comunitario (ODSEC), Thais Reyes Serrano,
La vista, ante la Comisión Especial para la Erradicación de la Pobreza que preside la senadora Elizabeth Rosa Vélez, fue citada en respuesta a la Resolución del Senado 295 que solicita una investigación continua en torno a la ejecución de políticas públicas para combatir la pobreza, el hambre y fomentar el desarrollo y la autogestión comunitaria, entre otros fines.
La directora Reyes Serrano describió las iniciativas y programas que tiene a través de todo la Isla ODSEC, cuyos 65 empleados atiende a 765 comunidades especiales, más de 30,000 organizaciones sin fines de lucro.
Destacó que ODSEC ofrece un sinnúmero de servicios, tales como entrega de alimentos a personas mayores de 65 años, realojamiento de familias, entrega de títulos de propiedad, remplazo de techos con toldos azules por techos seguros, establecimiento de conectividad digital a comunidades desventajadas, liderazgo comunitario y mejoras de infraestructura.
Explicó que ODSEC, a pesar de tener recursos limitados, se tuvo que hacer cargo en mayo del 2019 del Fideicomiso Perpetuo para las Comunidades Especiales luego de la quiebra del Banco Gubernamental de Fomento, incluyendo los servicios financieros, contables, legales y administrativos.
A pesar de la necesidad existente de combatir la pobreza, explicó que al momento de hacer la petición de presupuesto solicitaron $20 millones, que era el presupuesto que había tenido la oficina antes, pero no recibieron nada.
Sostuvo que “pasamos de 20 a cero, porque la Junta de Supervisión Fiscal (JSF) nos dejó sin dinero”. Agregó que “estuvimos sin dinero hasta septiembre para trabajar ningún tipo de proyecto”.
No obstante, dijo, el gobierno proveyó $20 millones, y con esa partida están trabajando en la iniciativa “blue roof” que persigue remplazar los techos de toldos azules resultantes de los desastres de los huracanes Irma y María por techos seguros.
Reyes Serrano, como parte de su ponencia, solicitó a la Legislatura que tomaran en cuenta la petición que hicieron antes para el Proyecto del Senado 293 (Ley de Política Pública de Puerto Rico para Combatir la Pobreza y la Desigualdad Social), que no fue acogida, de establecer la diferencia entre pobreza absoluta y pobreza relativa, siendo la primera aquella en que las carencias son tan extremas que atentan contra la vida y seguridad de la persona. Sostuvo que establecer esa definición ayudaría a extender asistencia de forma más expedita por tratarse de una emergencia.
Asimismo, Reyes Serrano pidió a la Comisión que el Senado tome en cuenta la petición presupuestaria de ODSEC en la elaboración del próximo presupuesto, de manera que puedan llevar a cabos sus iniciativas de lucha contra la pobreza.
La directora de ODSEC recordó que para lograr la erradicación de la pobreza se necesita invertir recursos y esfuerzos por parte del Estado y alertó sobre el hecho de que, si bien los beneficios de esas iniciativas para erradicar la pobreza son “innumerables” también “son difíciles de cuantificar o analizar desde la métrica conocida como retorno de inversión” que, bajo el control financiero que establece la JSF, prioriza y promueve aquellas iniciativas que tienen beneficio económico cuantificable.
La senadora Rosa Vélez llamó a la directora de ODSEC a trabajar en conjunto en esos esfuerzos para acabar con la pobreza, y, como presidenta también de la Comisión de Innovación, Telecomunicaciones e Infraestructura, le pidió una lista de los proyectos relacionados con infraestructura en las comunidades que no han podido llevar a cabo por falta de fondos, para poder ayudar a su realización.