Uno de los integrantes del Club de Bomberitos de la Escuela Almirante Sur, en Vega Baja, conoció hoy, viernes, al gobernador de Puerto Rico, Alejandro García Padilla y en su encuentro cercano con el mandatario hubo hasta una trompetilla burlona.

El pequeño acudió con otros compañeros de su salón de kínder a la ceremonia en honor a bomberos destacados en La Fortaleza, pero durante el evento llamó la atención de García Padilla cuando se dedicó a mover el micrófono mientras el primer ejecutivo ofrecía su mensaje.

El niño, sentado en el suelo del Jardín Hundido, hizo que García Padilla cambiara su discurso para hacerle caso justo en el momento en el que hablaba sobre los clubes de bomberitos que se han constituido en varias escuelas y residenciales públicos.

“Hoy tenemos alrededor de 350 bomberitos. Con la Fundación de A-Mar, (el Cuerpo de Bomberos) ha trabajado una campaña de educación sobre quemaduras de niños y estamos entrenando a los niños a cómo moverle el micrófono al gobernador mientras el gobernador habla…”, dijo García Padilla provocando la risa de los presentes.

“Y cómo se ríe… Obviamente, vemos cómo este tipo de clubes fomenta el liderato y la acción voluntaria…”, añadió, en clara referencia a los movimientos del inquieto bomberito.

Luego, cuando la interrupción fue más evidente, el gobernador exclamó “este es un bribón”. 

“Ven acá… ¿Cómo tú te llamas?”, le dijo acercándole el micrófono. Entonces, el pequeño respondió con una trompetilla que resonó a través de todas las bocinas ubicadas en el espacio abierto.

“Bonito nombre”, le contestó el gobernador. 

Luego, el niño le precisó que se llamaba “Josué” y le contestó afirmativamente cuando le preguntó si iba a ser bombero.

“¿Y vas a ser hombre elástico? Ahora te pongo el micrófono más lejos a ver si lo alcanzas. Él va a hacer el intento. A que lo logra. Lo bueno es que yo tengo tres que me han entrenado para estos momentos”, comentó en tono jocoso en referencia a sus hijos Ana Patricia, Diego y Juan Pablo.

García Padilla tomó un momento adicional en el paréntesis de su discurso para explicar lo que estaba ocurriendo: “hay unas pajitas ahí en el piso. Entonces, él empieza a jugar con las pajitas en la medida en que va acercando la mano al micrófono o al podio, así que (hay) creatividad, sin duda alguna”. 

Después continuó con su discurso y procedió con la entrega de reconocimientos a los bomberos destacados.