Con un llamado a la unión, a salir a votar en alianza y fuera de líneas partidistas, el Partido Popular Democrático (PPD) celebró el cierre de su campaña electoral con su principal candidato David Bernier enfatizando que son las elecciones más críticas en la historia del país, y por ende, se necesita una persona con experiencia en la gobernación.

Bernier, quien ofreció su mensaje desde una guagua apostada en el medio de la multitud mientras la alta cúpula de su colectividad lo observaba desde una tarima principal con techo, dijo que aún sin saberlo toda su vida se había preparado para llevar las riendas del país.

Mencionó que desde el ejemplo de sacrificio y trabajo de sus padres, ambos servidores públicos, hasta sus maestros en la escuela pública, su trabajo como líder estudiantil en la Universidad, como dirigente de la Oficina de Asuntos de la Juventud, luego como secretario de Recreación y Deportes, y de Estado, o como presidente del Comité Olímpico, son muchas las instancias en que ha demostrado su compromiso de trabajo.

“Mi candidatura a la gobernación no es un antojo ni un capricho personal. Esto es un compromiso de vida. Esto es una responsabilidad que como puertorriqueño que ama a su tierra he venido a cumplir en el momento más difícil de mi tierra, pero no podía ser en otro momento. El deber se cumple cuando toca, no cuando conviene”, declaró.

Bernier prometió defender el sistema de retiro de los empleados públicos y tener como prioridad a la gente de aquí: empresarios locales y residentes.

“A los acreedores los respetamos y reconocemos como importantes para el desarrollo de Puerto Rico pero les decimos que tenemos que reestructurar la deuda”, que asciende a unos $70,000 millones, antes que cualquier cosa, indicó el líder político.

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Dijo que si los líderes se hubiesen puesto de acuerdo, sin fanatismo y “obsesión” ideológica, se hubiese logrado mucho más sin llegar a cerrar el gobierno en el 2006 y no hubiese subido tanto la deuda.

Argumentó además que cerca del 60% de los electores ha dicho que no quiere que su contrincante novoprogresista Ricardo Rosselló Nevárez sea quien gobierne, y ese mismo porcentaje es el que quiere un país estable, sereno ,donde se pueda coexistir aunque se piense diferente. Insistió en que son más los que no quieren “que nada afecte nuestro sentido de identidad”.

“Si somos más tenemos que ir el martes a hacer causa común… si votamos, ganamos”, declaró. De ahí la frase que tanto él como otros líderes de la colectividad repitieron de que se busca en estas elecciones “una nueva mayoría”.

Bernier agradeció a su familia, la presentadora de televisión Alexandra Fuentes, a quien llamó su flaca bella, y a sus hijos Adrián y Miranda.

“Yo estoy seguro que cuando crezcan sabrán que la razón por la cual papá se levantaba temprano y llegaba tarde era una causa justa”, indicó.

Aunque el actual gobernador Alejandro García Padilla estuvo en la tarima, no se dirigió al público, ni se reconoció su presencia. Quien no estuvo en la tarima fue Jaime Perelló a quien Bernier le pidió la renuncia como presidente cameral tras ser vinculado al esquema de corrupción que encabezó el exrecaudador de la colectividad, Anaudi Hernández.

No faltó el momento simpático o jocoso, cuando luego de mencionar las cualidades de su esposo, como su integridad, verticalidad, su amor al país y su capacidad de trabajar, Alexandra dijo que “a veces no es muy fotogénico… ¡pero es que él no puede tenerlo todo!”

Muchos se sorprendieron cuando en una oración previa a los mensajes, unos de los pastores dijo en tarima que David era el “nuevo profeta” de Puerto Rico.

Hubo además una intervención musical, con los reguetoneros Jowel y Randy quienes preguntaron por Jesús Manuel Ortiz el secretario de Asuntos Públicos de La Fortaleza y luego dijeron al gobernador que sabían que a él le gustaba “bailar hasta abajo”.

El cierre de acto artístico estaría a cargo de Jowel y Randy, quienes volvieron a la tarima, además de Karis, y Pirulo y la Tribu. Antes de los mensajes estuvo amenizando la Tribu de Abrante.