El congresista demócrata Raúl Grijalva -quien lideró el esfuerzo legislativo a favor de que se otorgara a Puerto Rico $1,000 millones para instalar paneles solares y baterías de almacenamiento en techos de residencias de personas de bajos recursos y/o discapacitados- aprovechó su visita al archipiélago para explicar que la decisión de descartar que alguna agencia estatal controle esos fondos no es algo exclusivo que se hará en la isla, sino que es “solo un ejemplo” de una acción que se va a replicar en otras jurisdicciones de Estados Unidos.

Las expresiones de Grijalva surgen como reacción a la percepción de desconfianza hacia el gobierno local que crearon las declaraciones de la secretaria del Departamento de Energía (DOE), Jennifer Granholm, quien a principio de junio hizo público que su agencia no tiene la intención de seleccionar una dependencia estatal para administrar los fondos de la cuantiosa asignación destinada a la instalación de paneles solares.

“La intención de los $1,000 millones que autorizamos en el Congreso para este proyecto aquí en Puerto Rico fue sencillamente eso: un ejemplo, un modelo. Y, no solamente para aquí en Puerto Rico, sino para todo los Estados Unidos en general”, manifestó el congresista en una conferencia de prensa efectuada en La Fortaleza, tras reunirse con el gobernador Pedro Pierluisi, precisamente, para discutir los avances en temas de energía y reconstrucción.

Grijalva -quien presidió el Comité de Recursos Naturales de la Cámara de Representantes cuando se aprobaron los fondos- reiteró que desde su génesis el programa dictó responsabilidades de manejo de fondos al DOE.

“Después de un tiempo, de tener estos recursos aquí, sin duda, va a haber un cambio y se va a mover (el manejo de fondos) a Puerto Rico... pero a este punto para la contabilidad y para estar seguro que ninguna agencia federal tenga la oportunidad de decir que alguien más (dejó la oración incompleta)... pues, no. Ya tuvimos esas cuestiones con FEMA (Agencia Federal para el Manejo de Emergencias), ya tuvimos esas cuestiones con HUD (Departamento de Vivienda Federal) y en este instante la secretaria quiso tener este ejemplo que, no solamente va a ser aquí, sino que se va a replicar en otras partes de los Estados Unidos”, acotó.

Precisamente, Grijalva, junto a otros colegas demócratas, extendió una carta hace unos meses a Granholm en la que hizo una serie de recomendaciones en torno a la implantación del programa, incluido el asunto de evitar dejar en manos de agencias de gobiernos de Puerto Rico y Estados Unidos la responsabilidad de la reconstrucción, dar prioridad en los beneficios a los discapacitados de bajos recursos y a dar oportunidad a grupos comunitarios, sin fines de lucro e, incluso, a los municipios en la ejecución de la iniciativa.

La justificación de los congresistas para hacer las sugerencias estuvieron asociadas a la incomodidad generada con el proceso de retrasos con el desembolso de fondos asignados por FEMA y HUD, principalmente tras el huracán María, y el efecto que esa falta de celeridad ha tenido en los esfuerzos de recuperación y modernización de la red eléctrica en la isla.

Por su parte, el gobernador ripostó cualquier argumento que apunte a desconfianza por parte del gobierno federal hacia su administración y sostuvo que la relación entre ambos gobiernos es “inmejorable”.

“La relación de trabajo de mi administración con la del presidente (Joe) Biden es inmejorable. Voy a decirlo otra vez: la relación de trabajo de mi administración con la del presidente Biden es inmejorable, es excelente. O sea, y el que trate ahora de insinuar que, porque la secretaria está a cargo de ese programa, que eso es falta de confianza en el gobierno de Puerto Rico, está faltando a la verdad. Está totalmente equivocado porque si hay algo que a mí me enorgullece es, precisamente, la relación que tiene mi administración con la administración de Biden”, subrayó.

El Primer Ejecutivo dijo que aprovechó la reunión con Grijalva para, efectivamente, observar las estadísticas del uso de los fondos de FEMA y destacar que ha habido “un gran avance desde mediados del año pasado” cuando la agencia federal autorizó por primera vez en toda la nación americana a que se adelantara capital, en lugar de funcionar por reembolsos. Agregó que lo mismo ocurrió a principios de año cuando HUD permitió adelantos de fondos de los programas CDBG-DR, algo que esperan que ocurra también con los fondos de CDBG-MIT.

“O sea que si acaso lo que estamos viendo es gran confianza de parte del gobierno federal en nosotros. Una relación muy buena en la que hacemos propuestas y no todas, pero muchas, las acogen”, reiteró.

Ambos destacaron que otros temas discutidos en la reunión fueron los proyectos de reconstrucción del sistema eléctrico, destacando que hay 131 aprobados por FEMA y que esta agencia federal ha obligado $1,600 millones para obras permanentes. De estos, se han desembolsado $330 millones. “Y esperamos que para final de este año tengamos proyectos obligados, proyectos de obra permanente en nuestro sistema eléctrico por la cantidad de $4,000 millones. O sea, esto ya tiene un momentum que no hay quien lo pare”, dijo Pierluisi.

El gobernador puntualizó que otro tema en la agenda fue la importancia de la confiabilidad del sistema de transmisión y distribución de energía.

“Estamos en la construcción de un nuevo sistema de manejo de la energía. En inglés le dicen New Energy Management System, un sistema para administrar la red a la altura del siglo 21, no como el que tenemos, sino totalmente tecnológico”, dijo.

Mencionó también un sistema de medición neta de energía, “pero realmente inteligente”, que mida de forma acertada el consumo, incluyendo la que se genera en horas pico.

“De igual manera mencionamos la microrred que va a cubrir todas las necesidades de Vieques y Culebra, la microrred que va a cubrir todas las necesidades del Centro Médico (Río Piedras) y los dispositivos que se están instalando en la red, que básicamente permiten que se aísle cualquier área en la cual se está llevando a cabo una reparación y construcción, cosa de que no se afecten grandes áreas”, explicó Pierluisi.

Asimismo, mencionó que actualmente la isla cuenta 80,000 sistemas solares instalados que generan cerca de 500 megavatios de energía y estableció que lo que se está percibiendo es que de mes en mes esa cantidad está aumentando a entre 3,000 y 3,500 sistemas nuevos.

“Es importante que sigamos haciendo esto, básicamente, convirtiendo nuestro sistema en uno principalmente solar y debidamente reglamentado, regulado por el Negociado de Energía de Puerto Rico”, manifestó.

En entrevista con El Nuevo Día, el congresista Grijalva confirmó que mañana, martes, su agenda incluye una mesa redonda sobre el uso de los $1,000 millones asignados al Departamento de Energía de Estados Unidos, en la que participarán la comisionada residente en Washington, Jenniffer González, organizaciones de personas discapacitadas y “aliados” en los esfuerzos para que el sistema energético de Puerto Rico esté basado en un 100% en fuentes renovables.

Grijalva cerrará sus reuniones el miércoles con conversaciones con grupos de interés sobre su proyecto de status 2757 de la Cámara de Representantes, que propone vincular al gobierno federal con un plebiscito entre la independencia, la soberanía en libre asociación y la estadidad. La legislación 2757 tiene hasta el momento el respaldo de 71 demócratas, incluido a Grijalva. Pero, solo ha sido coauspiciado por seis republicanos, entre ellos la comisionada residente.