A raíz del anuncio del gobernador Luis Fortuño sobre la colaboración de las autoridades federales en el esclarecimiento de crímenes violentos, Ana Cacho le envió una carta hoy al primer ejecutivo solicitando nuevamente que el Negociado Federal de Investigaciones (FBI) investigue el asesinato de su hijo Lorenzo González Cacho.

"Tristemente todos los días mueren más seres humanos inocentes tanto en la calle como en sus propios hogares y continúan sin resolverse, crímenes que han entristecido y desolado a todo el pueblo de Puerto Rico. Es por esto que respetuosamente le solicito nuevamente que refieran al FBI los horrorosos casos como los de la masacre de San Juan Park, el asesinato de dos atletas, el caso de Brendalys Sierra, y el de mi adorado Lorenzo, entre muchos", expresa Cacho, refiriéndose a la muerte de Lorenzo, de 8 años, ocurrida el 9 de marzo de 2010 en su hogar en Dorado del Mar, por lo que es señalada como sospechosa por el Departamento de Justicia, que aún no radica cargos en el caso.

"Señor Gobernador, mi petición solo pretende que se le dé más apoyo a las agencias estatales para que se esclarezcan y se encausen los verdaderos asesinos de todos los casos de crímenes violentos en Puerto Rico, entonces y solo entonces muchas familias podremos continuar viviendo con nuestro dolor pero en paz. Y de esta manera el pueblo de PUerto Rico podrá tener cierta tranquilidad en que se hace justicia y sentirán más seguros en nuestra isla", lee la misiva, a la que se le envía copia al secretario de Justicia, Guillermo Somoza; al director interino del FBI, Carlos Caces; y a la fiscal federal Rosa Emilia Rodríguez.

La carta enviada por correo electrónico es firmada por Cacho, y dice "siempre madre de Lorenzo y dos bellas niñas".

De hecho, desde finales de marzo de 2010, Cacho no ve a sus hijas, de seis y 14 años, ya que se le acusó por maltrato y fueron removidas por el Departamento de la Familia. Desde octubre, están bajo la custodia de su papá, Ahmed Alí González.