Luego de haber sido señalada -junto a otros quince mandatarios municipales- de haberse incrementado el sueldo a pesar de la crisis fiscal por la que atraviesa el País, la alcaldesa de Barceloneta, Wanda Soler, aclaró que no aumentó su salario, sino que comenzó a cobrar lo que le tocaba.

"La prensa ha dicho que la alcaldesa de Barceloneta se ha aumentado el salario y eso no es cierto; ahora es que voy a recibir el salario que me correspondía recibir desde abril del año pasado", dijo, sobre la nueva Ordenanza Municipal número 32 para “restablecer el sueldo del puesto de alcalde”, sometida el pasado mes de enero y que entrará en vigor este próximo 15 de marzo.

Según dijo, el supuesto aumento a $6 mil corresponde al salario de alcalde aprobado por la legislatura municipal en el año 2001, bajo la Ordenanza Municipal número 24, y el cual ella no aceptó cuando tomó las riendas del Municipio en abril del año pasado, “por respeto al pueblo”.

Soler Rosario afirmó que en aquel entonces no aprobó el salario de alcaldesa hasta tanto no fuera electa por el pueblo y se mantuvo cobrando su salario de $5 mil como ayudante especial.

"Yo he sido la responsable de que se malinterpretara todo esto porque si yo hubiese aceptado ese salario en abril del año pasado, tal y como establece la ley, esto hubiese pasado transparente", agregó.

La primera ejecutiva municipal asumió las riendas del Municipio en abril, tras haber sido seleccionada por una delegación, luego de que el ex alcalde Sol Luis Fontanes fuera arrestado por cargos de corrupción.

Barceloneta tiene un déficit de $6.8 millones, según el más reciente informe publicado por la Oficina del Contralor.