El plan “pide sacrificios”.

En un cónclave lleno de elogios al trabajo del gobernador para llegar a un acuerdo “a pesar de las diferencias”, los miembros de la Junta mencionaron dos áreas que serán modificadas a plazo inmediato: la reducción de la jornada laboral y la eliminación del bono de Navidad para los empleados públicos, a menos que se logre allegar al fisco $200 millones adicionales de aquí al mes de julio.

La reducción de la jornada laboral alcanzaría también a los maestros, con dos días de trabajo menos al mes. La presidenta de la Asociación de Maestros, Aida Díaz, se opuso tenazmente a ese apartado pidiendo que no se juegue con la educación de los niños de la Isla. La Junta se limitó a agradecer su intervención en la ronda de preguntas.

Las pensiones también sufrirían cambios. Al año 2020, se espera reducir un 10% de lo que se les da a los pensionados; se trata de un modelo “escalonado” en que aquellos pensionados que reciben $2,000 o menos no sufrirán ninguna reducción, a diferencia de lo propuesto inicialmente por la JSF. A partir de los $2,000, se le reducirá más a los que más reciban, hasta que el total del ahorro sume el estimado de entre $200 a $250 millones.

Por su parte, la gran incógnita es el área de Salud. Si bien no quedó claro qué es lo que hará la Junta con el sistema de sanidad público, el gobierno haría ajustes para la creación de una sola región de cobertura y establece topes en el gasto mensual del paciente. No se sabe, por ahora, qué pasará con los fondos que se dejarán de recibir tras la eliminación del American Care Act, también llamado “Obamacare”.

En cuanto a la Universidad de Puerto Rico, se supone que entreguen su plan fiscal el 31 de marzo, plazo que la presidenta interina de la institución, Dra. Nivia Fernández, advirtió que no podría cumplir. Se mantiene la orden de un recorte de $450 millones a la principal institución educativa del país, pero ésta tendría que negociar directamente con la Junta, según dijo Ramón Rosario, secretario de Asuntos Públicos de La Fortaleza, en conferencia de prensa luego de la reunión de la JSF.

¿Dónde quedan los impuestos? Deberían permanecer como sugirió el gobierno, incluyendo el aumento al arbitrio de cigarrillos, alza en las licencias, multas y sellos, así como la retasación de las propiedades para generar más fondos.

“En cualquier crisis financiera existe la tentación de creer que uno puede resurgir sin sacrificio, o con menos sacrificio, si tan solo otros asumieran los costos o si la elusiva recuperación acabara de llegar. El hecho es que cualquier solución real debe involucrar a todas las partes compartiendo en el esfuerzo, especialmente si es doloroso. Pero todos también deben compartir la oportunidad para un futuro mejor, más seguro y próspero. Siempre es tentador evitar decisiones difíciles asumiendo que la economía crecerá más rápidamente, los ingresos aumentarán o los gastos del gobierno se mantendrán por debajo del presupuesto. Pero en el pasado, este tipo de pensamiento ilusorio, la mayor parte de las veces, ha empeorado el problema, dejando a un lado la toma de decisiones”, dijo por escrito el presidente de la JSF, José Carrión.

Universidad de Puerto Rico

$450 millones: El recorte sugerido al sistema. La presidenta interina, Nivia Fernández, dijo que no era viable un recorte tan alto. Tienen hasta el 31 de marzo para someter su presupuesto. La Fortaleza puso sus asesores a la disposición del sistema educativo. 

Arbitrios e impuestos

$161 millones: Lo que entraría al fisco con el alza al impuesto del tabaco. En otros renglones, se mantendrían lo sugerido en el plan fiscal de Rosselló, que incluían aumentar el costo de las licencias y multas de conducir, y la extensión a 10 años del impuesto a las foráneas.

$78 millones: Lo que se espera que entre a las arcas con las retasaciones de las propiedades.

Jornada laboral y bono de Navidad

$200 millones: Lo que se debe lograr ahorrar de aquí al 30 de abril para no implantar recortes en la jornada laboral (un día a la semana) ni eliminar el bono. De no lograrse, los recortes entran en vigor en julio; el bono se revisaría en septiembre y de no cumplirse el ahorro se eliminaría o pagaría parcialmente.

Se mencionó el recorte de dos días mensuales de trabajo a los maestros. No se abundó en cuánto redundarían los ahorros. 

Salud

$750 millones: Los ahorros que se obtendrían con el “nuevo modelo” establecido por La Fortaleza y manteniendo la cobertura para todos los pacientes de la Reforma de Salud. La Junta quería un recorte de $1,000 millones anuales. 

Pensiones

10%: Reducción en el total de pagos luego del año 2020 a aquellos que ganen $2,000 o más. 

Desde el 2020, todos los nuevos maestros y trabajadores de seguridad y protección pública podrán aportar al Seguro Social. 

Vacaciones

$35 millones: Lo que debe ahorrarse el Gobierno en vacaciones, que antes se pagaban si el empleado no las tomaba.