A beber agua se ha dicho.

Es que mantenerse hidratado es clave para soportar esta ola de calor que azota a Puerto Rico, según detalló la secretaria auxiliar de Salud Ambiental del Departamento de Salud, Mayra Toro.

Según hizo constar, los trabajadores que por obligación están expuestos al sol, los niños, los adultos mayores y las mascotas son los que más corren peligro en este clima infernal que se registra con índices de calor que han sobrepasado los 120 grados Fahrenheit.

Aunque, dejó claro que “todos tenemos que tener visibilidad y reconocer que estamos expuestos a esta ola de calor que estamos viviendo, que es el resultado del cambio climático”.

Pero, de estos grupos, los trabajadores son los que por obligación tienen que exponerse al azote del sol para cumplir con las funciones asignadas. Por ello, a modo general, Toro precisó las opciones que se tienen para evitar enfermedades relacionadas al calor, que van desde agotamiento, calambres, quemaduras, mareos, vómitos, dolor de cabeza y desmayos, entre otras cosas.

La clave principal, según hizo constar, es mantenerse hidratado. Alertó que es con agua, no con bebidas carbonatadas, Gatorade o cervezas, ya que estas pueden estar “estimulando que eliminemos líquido y no es momento para ello”.

“Hay unos apáticos, pero tenemos alternativas allá afuera. En un sinnúmero de supermercados hay sabores que podemos añadir a nuestra agua que, de una manera, disimulamos el sabor... Podemos añadir estos sabores, que no necesariamente tienen un valor calórico, como el Crystal Light”, recomendó.

La experta indicó que el trabajador no debe esperar a que su patrono le provea el agua, sino ser proactivo en siempre tener disponible este líquido.

“Yo como individuo, como persona, asumo la responsabilidad de que tengo el consumo de agua adecuado. Hay que ser diligentes con nosotros mismos en ese aspecto”, afirmó.

Tomar periodos de descanso del sol directo y utilizar ropa que minimice la inclemencia de sus rayos también está en la lista de las recomendaciones para esta población trabajadora.

A modo de ejemplo, Toro señaló que, si a un policía lo ubican a trabajar en una intersección junto a otro compañero, uno puede trabajar bajo el sol por entre 15 a 20 minutos, mientras el otro se resguarda en la sombra.

“Me retiro del área para refrescarme”, explicó, sobre la importancia de recesar de los rayos directos del sol.

Dijo que este tipo de pausa se debe tomar, principalmente, cuando el castigo del sol es más intenso. Señaló que este periodo sería entre las 10:30 a.m. a 3:30 p.m.

En cuanto a la ropa, Toro dijo que aquel que trabaje en el exterior debe evitar la ropa oscura y en tela pesada y calurosa, como lo es el poliéster.

Recomendó utilizar ropa que sea de tela de algodón o de tecnología “Dry-FIT”, la cual permite la transpiración y ayuda a mantener la temperatura corporal.

“Hay que alejarnos de los colores oscuros o brillantes, porque atraen los rayos solares. Los colores idóneos son blanco, crema o amarillo, porque no absorben la luz ni los rayos solares. Lo que hacen es reflejarlo. Hay que alejarnos del negro, brown, azul y rojo, porque absorben los rayos del sol y aumenta la temperatura corporal”, detalló la funcionaria.

Usar mangas protectoras para el sol, así como sombrero o gorro, que cubran el cuello y las orejas, también son medidas trascendentales para evitar quemarse.

“Que estoy obligado a usar un uniforme y el patrono no proveer alternativa, yo como individuo compro los artículos para cuidar mi salud… Siempre hay alternativas de cómo poder manejar la situación sin incurrir en gastos mayores o de mayor complejidad”, alertó la experta.

También se debe usar protección solar de 50 SPF o mayor. El mismo debe ser a prueba de agua, para que no se desvanezca con la sudoración y debe ser reaplicado varias veces al día en las zonas que no fueron cubiertas con ropa, en especial la cara.

Toro explicó que cubrirse como es debido del sol y aplicarse bloqueador solar evita “el factor de riesgo para desarrollar cáncer a nivel de piel”.

A modo general, la funcionaria estipuló que les corresponde a las divisiones de recursos humanos de cada empresa o agencia gubernamental evaluar el riesgo que tienen sus empleados y “delinear estrategias o protocolos que pudiesen implementar”. Dijo que el desarrollo de estos protocolos puede realizarse con las guías que ya ha creado el Centro para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) y que están disponibles en su página cibernética.

En cuanto a la población general, la secretaria auxiliar señaló que se pueden tomar iguales medidas. Sin embargo, fue más enfática en que en estos periodos de calor no se debe estar expuesto al sol directo y que se deben tomar previsiones para aliviar lo agobiado que se siente la persona bajo estas altas temperaturas.

A modo de ejemplo, habló que disfrutar de un límber o esquimalitos haría la diferencia en los niños. Refrescarse con toallas humedecidas de agua fría, ejercitarse o sacar a pasear a su mascota bien temprano en la mañana o en horas de la noche y no irse a broncear en la playa son decisiones acertadas en medio de esta ola de calor, afirmó.