El grupo de manifestantes que protestó de viernes a domingo frente a La Fortaleza en reclamo de acción contra la violencia machista anunció que continuará exigiendo que se atienda ese mal de manera urgente. 

La protesta tuvo momentos tensos cerca del mediodía de ayer cuando manifestantes intentaron pasar las vallas del perímetro de seguridad en torno a la mansión ejecutiva y chocaron con la Policía. 

Vanesa Contreras, de la Colectiva Feminista en Construcción, que organizó la actividad del Plantón Contra la Violencia Machista, indicó que decidieron intentar entrar a La Fortaleza luego de esperar en vano al gobernador Ricardo Rosselló, a quien le piden que firme una orden ejecutiva decretando un plan de emergencia nacional contra la violencia de género. 

“Le trajimos (al gobernador) una orden ejecutiva, es una propuesta. Porque muchas veces han dicho esta gente solamente tiene protestas. Pues aquí hay protestas y propuestas concretas para mejorar la situación, para que las mujeres no sigamos estando violentadas”, dijo la activista. 

“Aquí cuando llegó el zika, hubo una campaña educativa para prevenir el zika, porque era importantísimo, para que la gente conociera del zika y que nadie se contagiase. Sin embargo, las Naciones Unidas lleva años diciendo que la violencia contra las mujeres, la violencia de género, es una pandemia mundial y aquí no hay ningún plan, a nivel estatal, que cubra todas las agencias del estado, para prevenir esa pandemia. 22 mujeres han muerto (en lo que va de año)”, reclamó Contreras. 

Sobre el incidente dominical, indicó que trataron de pasar las vallas “y enseguida nos trajeron a la fuerza de choque, y sacaron las macanas, y empezaron a tirar pepper spray (gas pimienta)”. 

“Aquí se preocupan más por tener a los bonistas contentos que por dar una vida digna a las mujeres. Aquí hay que hacer un plan de emergencia fiscal porque hay que pagarles a los bonistas, y sin embargo no hay un plan de emergencia fiscal para erradicar la violencia machista. Esas son las prioridades de este gobierno”, denunció la activista.

Por su parte, el comisionado de la Policía, Henry Escalera, dijo que los efectivos destacados alrededor de La Fortaleza estaban “garantizando la libre expresión a los ciudadanos”, y agregó que se había dado “una situación” cuando manifestantes intentaron mover un perímetro y se llevó a cabo “una contención”. 

“Yo estoy de acuerdo que no haya violencia contra la mujer. Estamos claros que tenemos que atender esta situación. El Negociado de la Policía tiene un compromiso de atender, tenemos unos protocolos y unos procedimientos que los vamos a ejercer”, dijo Escalera. “Al policía se le da un adiestramiento de 16 horas. Hay una orden general que es bien clara”. 

El comisionado condenó los incidentes de violencia de género que involucran a policías, y lamentó que sea una situación que continúe ocurriendo no solo en la Uniformada, sino en todo Puerto Rico. “Tenemos unos procedimientos internos que consideramos efectivos. Pero no quiere decir que no van a pasar los casos. Nada es 100% infalible. Hay espacio para mejorar”. 

Desde La Fortaleza, el secretario de Asuntos Públicos, Ramón Rosario, se solidarizó con la manifestación, pero condenó que la misma escalara hasta la confrontación con la Policía. 

Rosario dijo que el sábado dos representantes oficiales, Ileana Aymat y Johanne Vélez, hablaron con el grupo de manifestantes por dos horas. 

“Con los méritos de la manifestación, el gobernador y la administración se solidarizan. Es un tema que tenemos que atender desde la raíz. Creo que podemos sentarnos y mirar qué alternativas podemos añadir”, dijo Rosario. “Con lo que no estamos de acuerdo y no vamos a tolerar es que se use violencia para condenar la violencia contra las mujeres”.