El Distrito Escolar de Uvalde anunció este jueves el despido de una policía escolar recién contratada al darse cuenta que hizo parte de los agentes que respondieron al tiroteo ocurrido el pasado 24 de mayo y que han sido cuestionados por la demora neutralizar al atacante que mató a 19 niños.

Crimson Elizondo fue despedida este jueves, después que la cadena CNN revelara que ella había sido una de las primeras agentes del Departamento de Seguridad Pública de Texas (DPS) en llegar al incidente, pero permaneció la mayor parte del tiempo fuera del edificio.

La cámara corporal que Elizondo usaba ese día la captó diciendo: “Si mi hijo hubiera estado allí, yo no habría estado afuera. Te lo prometo”, según el informe de CNN.

El distrito escolar de Uvalde dijo en un comunicado que los comentarios de Elizondo “no son consistentes con las expectativas del distrito”.

Elizondo abandonó el DPS en el verano y se integró en el grupo de 10 nuevos oficiales contratados por el distrito para velar por la seguridad de los niños en las escuelas de Uvalde, tras la masacre que se saldó con la muerte de 19 niños y dos maestras.

El distrito se disculpó con las familias por este nuevo traspié.

Un grupo de padres protestó hoy frente a las instalaciones del distrito, según reportó la televisora KSAT.

La matanza desató una ola de críticas por la falta de acción y coordinación de la policía escolar, los agentes de DPS y los otros agentes que respondieron al tiroteo.

Según una investigación de la Cámara de Representantes de Texas, 376 agentes de diversas agencias de la ley respondieron al tiroteo antes de que mataran al atacante.

Los oficiales tenían pistolas, rifles y chalecos antibalas, pero aun así esperaron más de una hora para confrontar al autor del tiroteo, Salvador Ramos, de 18 años.

El jefe de la Policía Escolar de Uvalde, Pete Arredondo, fue despedido en agosto pasado.

Mientras, el DPS solicitó una investigación formal contra cinco de sus oficiales que respondieron al mortal tiroteo, dos de los cuales ya fueron suspendidos.