Worcester, Massachusetts. Cinco universitarios de Massachusetts hicieron su primera aparición en la corte el jueves, acusados de atraer a un hombre a su campus a través de una aplicación de citas y luego secuestrarlo como parte de una tendencia de “atrapar a un depredador” en TikTok.

Los estudiantes, todos adolescentes de la Universidad Assumption, una escuela privada católica en Worcester, fueron acusados en la Corte del Distrito de Worcester por conspiración y secuestro. Se ingresaron automáticamente declaraciones de no culpabilidad para todos, y deben regresar a la corte el 28 de marzo para una conferencia previa al juicio.

Los acusados en el caso son Kelsy Brainard, de 18 años; Easton Randall, de 19; Kevin Carroll, de 18; Isabella Trudeau, de 18 y Joaquín Smith, 18. Hay un sexto acusado que es un menor de edad que será acusado por separado.

La policía dijo que la cuenta de Tinder de Brainard se usó para corresponder con el hombre. Ella enfrenta un cargo adicional de intimidación de testigos. Un estudiante masculino del grupo también enfrenta un cargo de asalto y agresión con un arma peligrosa.

El objetivo — un miembro del servicio militar en activo de 22 años — le dijo a la policía que estaba en la ciudad para el funeral de su abuela en octubre y que “solo quería estar cerca de personas que estuvieran felices”, según un informe de la policía del campus. Añadió que una estudiante cuyo perfil de Tinder decía que tenía 18 años lo invitó y lo llevó a un salón en el sótano.

Unos minutos después, “un grupo de personas salió de la nada y comenzó a llamarlo pedófilo”, acusándolo de querer tener relaciones sexuales con chicas de 17 años, según el informe.

El hombre le dijo a la policía que se zafó y fue perseguido por al menos 25 personas hasta su auto, donde fue golpeado en la cabeza y le cerraron la puerta de su coche encima. Huyó y llamó a la policía de la ciudad.

El video de vigilancia del campus muestra a un gran grupo de estudiantes, incluida la mujer, “todos con sus teléfonos móviles en lo que parece ser una grabación de todo el episodio”, dice el comunicado policial. Se les ve “riendo y chocándose las manos” en lo que parecía ser “un evento deliberadamente escenificado”, y no había evidencia que indicara que el hombre buscaba relaciones sexuales con chicas menores de edad, según el informe policial.

Después del asalto, Brainard denunció al hombre a la policía como un depredador sexual y dijo que él la había asustado. La joven dijo que él había venido al campus sin ser invitado y que ella había enviado un mensaje de texto a un amigo masculino que lo ahuyentó. Todo esto era falso, concluyó la policía del campus después de revisar las grabaciones de vigilancia y encontrar que se estaban circulando entre los estudiantes videos desde una “perspectiva en primera persona”.

A los adolescentes se les ordenó en la corte no tener contacto con el hombre atacado.

Un abogado de Brainard, Christopher Todd, declaró: “Esperamos únicamente que el proceso se lleve a cabo”. El abogado de Trudeau, Robert Iacovelli, dijo después que su cliente es inocente y presentó una moción buscando el desestimar los cargos en su contra. Otros abogados no fueron contactados inmediatamente para comentar sobre sus declaraciones.