Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 6 meses.
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Un hombre de Florida de 72 años se disponía a dormir cuando escuchó “un increíble rugido” y cayó al suelo, cubierto de material aislante y vidrios rotos, sobreviviendo por poco a la caída de un avioneta que arrasó su casa rodante y destruyó el remolque de al lado.
Al menos tres personas que se encontraban en tierra murieron cuando el monomotor Beechcraft Bonanza V35 se estrelló en el lote de casas rodantes de Bayside Waters el jueves cerca de las 7:00 de la tarde, informaron las autoridades.
El piloto del avión reportó un desperfecto en el motor poco antes de estrellarse, informó el viernes la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés).
Los bomberos no han informado cuántas personas había dentro de la casa rodante de doble amplitud cuando el avión cayó a tierra, incendiando toda la estructura. Sin embargo, la FAA confirmó el viernes que dos personas fallecieron.
“La aeronave fue hallada en una de las estructuras”, dijo Scott Ehlers, jefe de bomberos de Clearwater en una conferencia de prensa realizada por la noche.
El piloto reportó una emergencia al Aeropuerto Internacional de St. Pete–Clearwater poco antes que la avioneta saliera del radar a unos 5 kilómetros (3 millas) al norte de una pista de aterrizaje, indicó Ehlers. El aeropuerto se encuentra a alrededor de 11 kilómetros (7 millas) al sureste de Clearwater.
Joe Miller, envuelto en una manta y todavía temblado horas después del incidente, dijo al diario Tampa Bay Times que se abrió paso a través de las ruinas de su casa rodante, que quedó destruida por la explosión, y fue recibido en el exterior por las llamas que saltaban desde la casa de al lado.
Tras ocho años en la casa rodante, en una gran comunidad de más de 55 miembros cerca de la autopista federal 19, Miller dijo al diario que no sabía lo que iba a hacer.
“El techo se desprendió y no sé qué es lo que quedó adentro. Sólo sé que tengo suerte de estar aquí”, dijo.