WASHINGTON  — Los representantes republicanos quieren que el Congreso lidie con el problema de las agobiadas finanzas del programa de discapacidad del Seguro Social, sentando las bases para un contencioso debate que pudiera afectar a unos 11 millones de personas en medio de la próxima campaña presidencial.

La Cámara de Representantes ha adoptado una regla que pudiera forzar a los legisladores a lidiar con el asunto para el final del 2016, cuando se proyecta que el programa se quede sin reservas, lo que desataría recortes automáticos de prestaciones.

Una solución fácil estaba disponible. 

El Congreso pudo haber redirigido ingresos generados por los impuestos a las nóminas del programa de jubilaciones del Seguro Social, que es mucho más grande, como lo han hecho previamente los legisladores.

Relacionadas

Pero la nueva regla del martes impide que eso suceda, a menos que sea parte de un plan más amplio para mejorar las finanzas del Seguro Social, sea cortando prestaciones o aumentando impuestos.

Meterse con el Seguro Social nunca ha sido fácil, y si se tienen en cuenta las políticas de un período electoral, se dificulta aún más encontrar votos para esas alternativas.

El representante republicano Tom Reed, dijo que él patrocinó la medida para impedir que el Congreso "saquee" el fondo de jubilaciones para fortalecer el programa de discapacidades.

Reed dijo que los legisladores trabajan en propuestas para fortalecer las finanzas del programa, pero que sacar dinero del fondo de jubilaciones es "una cura a corto plazo".

"Tenemos que hacer algo mejor que eso", dijo Reed.

Paul Ryan, el republicano que encabeza la Comisión de Recursos y Arbitrios de la cámara baja, dijo que "solamente queremos asegurarnos de que mejoramos la integridad de todos los fondos del Seguro Social".

Defensores de los ancianos dicen que la regla pudiera ser usada para ayudar a aprobar recortes de prestaciones, especialmente porque los republicanos se han opuesto a elevar impuestos.

"Es un intento flagrante en el primer día en que los miembros ocupan sus escaños de infiltrar una regla en el proceso que virtualmente garantiza recortes devastadores para beneficiarios del sistema de pagos por discapacidad del Seguro Social", dijo J. David Cox, presidente de la Federación Estadounidense de Empleados Gubernamentales.

David Certner, de la Asociación Estadounidense de Jubilados, dijo que sería un error eliminar la opción de redirigir dinero del fondo de jubilaciones.

"De otra forma, enfrentaríamos el vencimiento de un plazo, y ciertamente en los últimos años, hemos visto un Congreso incapaz de aprobar leyes, incluso con plazos delante de ellos", dijo.

Las nuevas reglas gobernarán la cámara baja por los próximos dos años. El libro de reglas de 36 páginas fue aprobado por una votación de 234-172, con la oposición de todos los demócratas y el respaldo de casi todos los republicanos.

El número de trabajadores, cónyuges e hijos que reciben prestaciones por discapacidad se ha disparado en la última década. Congresistas de ambos partidos dicen que el fraude es un factor en eso.

Unos 11 millones de personas reciben esas prestaciones, casi 40% más que hace una década. En comparación, unos 48 millones de personas que reciben jubilación o pensiones de sobreviviente por el Seguro Social.

A menos que el Congreso actúe, el fondo que respalda el programa se quedaría sin dinero en los últimos tres meses del 2016, de acuerdo con proyecciones de los supervisores. En ese momento, el programa recaudaría lo suficiente solamente para pagar 80% de las prestaciones.