El aumento en la incidencia criminal en Oakland, ha llevado a varias cadenas de comida rápida a cerrar los comedores de sus restaurantes, según reportó CNN.

Una de estas empresas, Taco Bell informó en un comunicado que “proporcionar un entorno seguro para los miembros del equipo y los clientes es la prioridad”, por lo que el propietario de las franquicias en cuestión, Diversified Restaurant Group, tomó esa determinación.

“El propietario y operador de la franquicia nos ha informado de que están evaluando y trabajando constantemente para garantizar un entorno seguro mediante la aplicación de procedimientos, como el cierre de los comedores, y la contratación de guardias de seguridad, y han tomado medidas adicionales para reunirse con las fuerzas del orden local”, añadió la empresa.

Diversified Restaurant Group posee unos 300 locales de Taco Bell y Arby’s, principalmente en el oeste de Estados Unidos.

Al menos cuatro de las tiendas han cerrado sus comedores, aunque continúan operando a través del auto servicio. Taco Bell tiene cerca de media docenas de restaurantes en Oakland.

CNN visitó una de las tiendas de Taco Bell que ha sido asaltada en los últimos cuatro meses. El restaurante todavía tiene madera en las ventanas, tras el robo más reciente hace tres semanas, cuando los ladrones estrellaron una camioneta a través de la ventana para robar una caja fuerte.

Otra cadena de comidas rápidas de Oakland también anunció el cierre permanente de uno de sus restaurantes por la misma situación. La cadena de hamburguesas In-N-Out también citó la delincuencia como motivo.

Un restaurante Denny’s en Oakland también cerró recientemente, después de más de 54 años, citando preocupaciones de seguridad pública.

Los robos en Oakland crecieron un 38% el año pasado, mientras que los escalamientos aumentaron un 23%. El robo de vehículos de motor también ascendió a un 44%. Aproximadamente, uno de cada 30 residentes de Oakland le robaron el vehículo el año pasado, según un análisis del San Francisco Chronicle.