Washington.- El representante Anthony Weiner se aferra a su banca en el Congreso pese a nuevas exhortaciones a que renuncie y a dos hechos significativos: otra foto lasciva que Weiner supuestamente se tomó apareció en Internet, y su esposa de menos de un año, Huma Abedin, está embarazada.

"No renuncio", dijo Weiner el jueves al New York Post. Se disculpará ante sus representados y tratará de ponerse al día con sus obligaciones, dijo, mientras que Abedin, alta asistente de la secretaria de estado Hillary Clinton, viaja en gira oficial al exterior.

El bebé en camino agrava un futuro ya complicado para el legislador demócrata de 46 años de edad, quien admitió el lunes que había enviado fotos y mensajes sexualmente sugerentes a seis mujeres que no conocía, y que después mintió al respecto a su esposa, su familia y sus representados.

Weiner se ha negado a renunciar pese a los detalles embarazosos que han aparecido sobre sus comunicaciones en línea.

Gennette Cordova, quien recibió una foto de Weiner que comenzó el escándalo, dijo que se había sorprendido tanto por esa intrusión en una conversación en la que ella apoyaba la política del representante que supuso que el mensaje era falso. "Yo nunca le envié ningún mensaje sugerente", dijo la estudiante universitaria de 21 años, del estado de Washington, al New York Times en una entrevista publicada el jueves.

Lisa Weiss, una crupier de blackjack de 40 años de Las Vegas, dijo en una entrevista televisiva que su diálogo con Weiner comenzó como un flirteo que él fue intensificando.

Numerosos demócratas han dejado pocas dudas de que desean que Weiner reconsidere su negativa a dejar el cargo y que lo haga rápidamente.

"Contar con el respeto de los representados es fundamental para un miembro del Congreso", dijo la representante Allyson Schwartz en una declaración. Fue la primera de un puñado de legisladores demócratas que manifestaron su opinión públicamente el miércoles. "En vista del comportamiento ofensivo de Wiener en línea, debería renunciar".