MOUNT HOREB, Wisconsin. La policía disparó y mató a un estudiante de Wisconsin fuera de una escuela secundaria, después de recibir un informe de que habían visto a alguien con un arma, dijo el fiscal general del estado en la primera sesión informativa de las fuerzas del orden sobre un incidente, que hizo que los niños huyeran en medio de disparos.

Las autoridades de Mount Horeb habían dicho previamente que un tirador activo que nunca llegó a entrar fue “neutralizado” fuera del edificio de la escuela secundaria del distrito el miércoles.

El Fiscal General Josh Kaul dijo en la rueda de prensa que nadie dentro de la escuela resultó herido en el incidente del miércoles. Dijo que el Departamento de Justicia del estado está manejando la investigación en curso sobre el tiroteo.

Para los niños en pánico y sus padres, el incidente inicial y la espera para reunirse fueron aterradores. Los padres describieron a sus hijos escondidos en armarios, temerosos de comunicarse por teléfono móvil, y un estudiante de secundaria dijo que su clase huyó inicialmente del gimnasio de la escuela en patines en línea.

El distrito utilizó mensajes de Facebook a lo largo del día para dar actualizaciones, la primera de ellas sobre las 11:30 de la mañana, informando de que todas las escuelas del distrito estaban cerradas. Las autoridades de Mount Horeb dijeron sin dar detalles que el “presunto agresor” resultó herido, y los testigos describieron haber oído disparos y haber visto a decenas de niños corriendo.

Más de cuatro horas después, los autobuses escolares permanecían alineados a lo largo de varias manzanas fuera de la escuela media y las autoridades habían utilizado cinta policial para rodear la escuela media, la escuela secundaria cercana y los campos de juego entre los dos edificios.

Policías de varias agencias patrullaron con rifles alrededor de la escuela secundaria el miércoles por la tarde. Las fotos del Wisconsin State Journal mostraban más de una docena de vehículos de las fuerzas del orden, incluidos camiones tipo SWAT, cerca de la escuela con las luces de emergencia parpadeando. Los socorristas que rodeaban una camilla en la acera también eran visibles.

El distrito dijo en varias publicaciones en Facebook que comenzaron alrededor de las 11:30 a.m., que los estudiantes de todas las escuelas del distrito estaban en aislamiento y se les dijo a los miembros de la familia que no acudieran a ninguna escuela.

“Una búsqueda inicial en la escuela media no ha arrojado sospechosos adicionales”, decía una publicación hecha alrededor del mediodía. “Y lo que es más importante, no tenemos informes de personas heridas, a excepción del presunto agresor”.

En una publicación anterior, el distrito dijo que “la amenaza ha sido neutralizada fuera del edificio”.

Los mensajes del distrito no daban detalles sobre lo ocurrido en la escuela de Mount Horeb, una ciudad del suroeste de Wisconsin situada a unos 40 kilómetros al oeste de Madison, la capital del estado.

La policía de Mount Horeb dijo que no podía proporcionar inmediatamente más información. Una persona que contestó al teléfono en la oficina del distrito escolar declinó hacer comentarios.

Un representante de la oficina del sheriff del condado de Dane no pudo ser localizado de inmediato.

Shannon Hurd, de 44 años, y su ex marido, Nathian Hurd, de 39, estaban sentados en un coche esperando a reunirse con su hijo de 13 años, Noah, que todavía estaba en la escuela cerrada.

Shannon Hurd dijo que fue alertada del incidente por un mensaje de texto de Noah diciendo que la quería. Dijo que casi se cae por las escaleras de su trabajo mientras corría para llegar a la escuela.

“Sólo quiero a mi hijo”, dijo. “Se supone que deben estar seguros en la escuela, en Mount Horeb de todos los lugares”.

Heidy Lange, propietaria de Firefly Events Decor & Flowers, dijo que estaba en su floristería a unas dos manzanas de la escuela secundaria cuando se asomó y vio a los niños corriendo y “probablemente 50 coches de policía de todas partes”.

“De repente había un montón de padres corriendo detrás de ellos”, dijo Lange. “Todos nuestros teléfonos pitaban con todas las alertas. Sería devastador para la ciudad que le pasara algo a un niño aquí”.

Jeanne Keller estaba en su tienda The Quilting Jeanne, situada a una manzana del campus que incluye la escuela secundaria y otro edificio escolar, cuando oyó unos cinco disparos.

“Fue tal vez como pow-pow-pow-pow”, dijo Keller a The Associated Press por teléfono. “Pensé que eran fuegos artificiales. Salí y vi a todos los niños corriendo (...). Probablemente vi a 200 niños”.

El distrito dijo en publicaciones de Facebook que estaba preparando autobuses para transportar a los estudiantes de las escuelas a un lugar donde las familias pudieran reunirse con sus hijos.