LAS VEGAS. Los reguladores de juego de Nevada han impuesto una multa de 10.5 millones de dólares al casino Resorts World de Las Vegas, por acusaciones de apuestas ilegales, muchas de las cuales se centraban en un corredor de apuestas vinculado al intérprete de la estrella del béisbol Shohei Ohtani.

La multa resuelve una denuncia que la Junta Estatal de Control del Juego presentó el año pasado acusando a uno de los mayores casinos de Las Vegas de acoger a personas vinculadas a apuestas ilegales y a personas con un historial de condenas por delitos graves relacionados con el juego, informó el Las Vegas Review-Journal.

La multa, emitida el jueves, es la segunda mayor impuesta por la Comisión del Juego de Nevada, que tiene autoridad sobre las medidas disciplinarias.

Como parte del acuerdo, Resorts World y su empresa matriz no admiten ni niegan las acusaciones. Pero el casino aceptó hacer cambios en su dirección y aplicar protocolos más estrictos para prevenir el lavado de dinero, informó el periódico.

Resorts World no respondió inmediatamente el viernes a las solicitudes de comentarios de The Associated Press.

Muchas de las acusaciones se centraban en Mathew Bowyer, un corredor de apuestas del sur de California que aceptó miles de apuestas deportivas del antiguo intérprete de la estrella del béisbol Shohei Ohtani. Bowyer se ha declarado culpable ante un tribunal federal de Santa Ana, California, de dirigir un negocio ilegal de apuestas y está a la espera de sentencia.

La Junta de Control del Juego de Nevada alegó que Resorts World permitió a Bowyer jugar 80 días distintos a lo largo de unos 15 meses, sin verificar repetidamente su fuente de financiación. Bowyer perdió más de 6.6 millones de dólares durante ese tiempo, mientras el casino le ofrecía regalos, descuentos y vuelos en su jet privado, según la denuncia.

La querella enumeraba originalmente 12 cargos contra Resorts World -seis relacionados con Bowyer-, entre ellos no distanciarse de presuntas casas de apuestas ilegales, no informar de presuntas reservas ilegales por parte de los anfitriones del casino y que los anfitriones remitieran a posibles clientes a presuntas casas de apuestas ilegales.

Otros cargos estaban relacionados con cientos de miles de dólares en créditos a otras personas con antecedentes de condenas por juego ilegal o delincuencia organizada - uno de los cuales fue condenado por dirigir un negocio de juego ilegal y otro que fue condenado en una operación de juego por Internet a gran escala.