WASHINGTON. Linda Tripp, cuyas conversaciones secretamente grabadas con la interna de la Casa Blanca, Monica Lewinsky, llevaron a un proceso de residenciamiento al presidente Bill Clinton en 1998, murió el miércoles a los 70 años.

Su muerte fue confirmada por el abogado Joseph Murtha. No proporcionó más detalles.

En agosto de 1994, Tripp se convirtió en especialista en asuntos públicos en el Pentágono, donde Lewinsky trabajaba después de ser interna en la Casa Blanca. Según los informes, las dos se hicieron amigos. Tripp hizo grabaciones secretas de conversaciones con Lewinsky, quien le dijo que había tenido una aventura con Clinton.

Tripp entregó casi 20 horas de cintas a Kenneth Starr, el fiscal independiente que investiga al presidente, lo que provocó la investigación que condujo a su juicio político. Cuando se supo el miércoles que Tripp estaba cerca de la muerte, Lewinsky tuiteó que esperaba su recuperación “sin importar el pasado”.