La policía estatal de Maine informó que un hombre que celebraba el Día de la Independencia el sábado murió cuando intentó lanzar un petardo desde su cabeza.

Stephen McCausland, un vocero del Departamento de Seguridad Pública de Maine, precisó que Devon Staples, de 22 años, residente en Calais, estaba lanzando petardos el sábado por la noche en el jardín de un amigo.

Agregó que Staples se colocó un tubo de mortero en la cabeza, encendió el petardo y recibió una herida mortal en la cabeza. Murió instantáneamente. La policía dijo que los amigos habían estado bebiendo.

El portavoz dijo que es la primera fatalidad en Maine por los fuegos de artificio desde que el estado los legalizó hace varios años.

Calais está en el este de Maine, en la frontera con Canadá, cerca de New Brunswick.

Autoridades estatales también investigaban otros incidentes relacionados con fuegos artificiales en los poblados de Friendship, Jefferson, Lebanon y Woodstock. En la mayoría de los casos se trataba de quemaduras y lesiones en los ojos.

En 2011 los legisladores votaron a favor de abolir una ley de 1949 que prohibía el uso de fuegos artificiales bajo la lógica de que la industria generaría empleos e ingresos adicionales.