Los reguladores en Estados Unidos abrieron una investigación en torno a Delta Air Lines, que seguía batallando para restablecer sus operaciones el martes, más de cuatro días después de que una fallida actualización de software causó un apagón tecnológico mundial e interrupciones en los viajes aéreos a nivel internacional.

El secretario del Transporte, Pete Buttigieg, anunció la investigación a Delta en la red social X el martes “para garantizar que la aerolínea está cumpliendo con la ley y cuidando de sus pasajeros durante interrupciones generalizadas continuas”.

“Todos los pasajeros de las aerolíneas tienen el derecho de ser tratados justamente, y me aseguraré de que ese derecho se respete”, añadió Buttigieg.

Hasta el martes al medio día, Delta y sus socios Delta Connection tenían casi 500 vuelos cancelados en la costa este de Estados Unidos, es decir, casi dos tercios de todas las cancelaciones en el país, según datos de FlightAware.

El apagón informático comenzó del jueves por la noche y siguió el viernes por la mañana, después de una actualización defectuosa de un software de la empresa de ciberseguridad CrowdStrike a más de 8 millones de computadoras Microsoft en todo el mundo.

La aerolínea con sede en Atlanta ha cancelado más de 6,600 vuelos desde el apagón tecnológico, mucho más que cualquier otra aerolínea, según cifras de FlightAware y el proveedor de datos de viajes Cirium.

Delta dijo que estaba cooperando con la investigación.

“Seguimos completamente concentrados en restaurar nuestra operación después de que la actualización defectuosa de Windows del proveedor de ciberseguridad CrowdStrike dejó inoperables los sistemas de tecnología en todo el mundo”, dijo un portavoz de la aerolínea en un comunicado. “En toda nuestra operación, los equipos de Delta están trabajando incansablemente para atender y solucionar los problemas de los clientes afectados por retrasos y cancelaciones mientras trabajamos para restaurar el servicio confiable y puntual que esperan de Delta”.

En un anuncio a los viajeros publicado en su sitio web el lunes, Delta dijo que sus tripulaciones están completas, pero que un sistema operativo crucial que garantiza que todos los vuelos cuenten con una tripulación completa “es sumamente complejo y requiere la mayor cantidad de tiempo y apoyo manual para que se sincronice”.

Buttigieg habló con el director general de Delta, Ed Bastian, el domingo sobre el alto número de cancelaciones de vuelos. El Departamento del Transporte dijo que sus principales funcionarios le han recordado a Delta su obligación de entregar reembolsos a los pasajeros cuyos vuelos han sido cancelados y que no quieren que ser programados en otro vuelo.