Houston, Texas. A pesar de que Texas registra este martes una cifra récord de 2,622 casos positivos de COVID-19, un nuevo máximo por quinto día consecutivo, el gobernador Greg Abbott aseguró durante una rueda de prensa que el estado cuenta con la capacidad suficiente para afrontar el aumento de nuevos casos.

De acuerdo con el Departamento de Salud de Texas, a la fecha hay un total de 14,993 camas disponibles en los hospitales, así como 1,675 camas en las unidades de cuidados intensivos y 5,869 ventiladores.

El gobernador manifestó que el estado se encuentra en este momento “mejor preparado” para enfrentar el coronavirus que como estaba en marzo y abril, debido a “nuevas estrategias" y tratamientos médicos y equipo de protección personal adicional en reserva.

Asimismo, se registró un aumento de hospitalizaciones por COVID-19 con 2,518 nuevos pacientes, a diferencia de los 2,326 del lunes, que significaron un nuevo máximo en un día por séptima vez en ocho días, según cifras reveladas por el Departamento de Salud de Texas.

“Es un porcentaje muy reducido dentro del número de camas que tenemos disponibles en los hospitales”, aseguró Abbott durante la rueda de prensa en Austin, donde sostuvo que, aunque hay más personas hospitalizadas, Texas se encuentra en un “nivel mínimo” de amenaza a la capacidad hospitalaria.

Según el gobernador, el incremento de casos positivos se debe en parte al reporte de casos en prisiones de los condados de Beaumont y Rusk, además de los casos registrados hoy en un centro de adultos mayores en el condado de Collin que aumentó su cifra a 120 positivos.

Abbott insistió en la importancia de aplicar “tres estrategias” para “reducir” el contagio del virus: el distanciamiento social, el frecuente lavado de manos y el uso de tapabocas. Sobre este último recalcó que las personas deben portar las máscaras cuando estén en público puesto que quienes son asintomáticos “pueden propagar el coronavirus”.

Aseguró que los residentes en Texas tienen la “capacidad y la responsabilidad” para evitar el contagio si siguen las medidas, puesto que el virus “no ha desaparecido mágicamente” del estado.

El juez del Condado de Dallas, Clay Jenkins, envió hoy una misiva al gobernador Abbott para solicitar que “considere exigir el uso de los tapabocas para prevenir el contagio” o que autorice a las autoridades locales tomar esa decisión por el bien de sus comunidades.

El condado de Dallas ha reportado un total de 14,843 casos positivos y 243 fallecidos, y un aumento en las hospitalizaciones.

Por el contrario, Abbot sostuvo que los gobiernos locales no podrán hacer uso de la autoridad contra aquellos que no sigan las medidas para controlar la pandemia, y consideró que enviar a las personas a prisión por no seguir las medidas “no es lo correcto”.

Ante la posibilidad de realizar la Convención Nacional del Partido Republicano el próximo mes en el Centro de Convenciones George R. Brown en la ciudad de Houston, Abbott opina que tanto eventos en centros de convenciones como en estadios pueden considerarse siempre y cuando cumplan con los “protocolos” para evitar el contagio.

A pesar del incremento de casos por la pandemia, Abbott anunció el incremento de 50 % a 75 % de la capacidad de comensales dentro de los restaurantes.