El gobernador republicano de Florida, Ron DeSantis, anunció el martes que le pedirá a la Corte Suprema del estado convocar a un jurado especial para investigar cualquier “ilegalidad” cometida en la aplicación de las vacunas contra el COVID-19.

El gobernador, con frecuencia mencionado como posible candidato presidencial para 2024, no especificó qué ilegalidades habría, pero sugirió que la medida arrojará información sobre las vacunas y sus posibles efectos secundarios.

Hizo el anuncio durante una reunión con el director de salud pública estatal, Joseph Ladapo, y un panel de científicos y médicos que mencionó denuncias de que las empresas farmacéuticas no han suministrado sus datos sobre las vacunas a investigadores independientes.

“Conseguiremos esos datos, lo quieran o no lo quieran”, expresó DeSantis. “En Florida, es ilegal desvirtuar o engañar, especialmente cuando se trata de la eficacia de un medicamento”.

Los jurados especiales en Florida, usualmente formados por 18 personas, pueden investigar actividades criminales y presentar cargos, pero también pueden examinar problemas sistémicos en el estado y hacer recomendaciones. En tiempos recientes se han formado paneles de ese tipo para inmigración y seguridad escolar.

DeSantis destacó que Florida recientemente obtuvo “3,200 millones de dólares mediante los tribunales en compensación por la crisis de los opioides. Así que no se trata de algo sin precedente”. Ese dinero provino en gran parte por vía de demandas judiciales contra compañías farmacéuticas, minoristas y distribuidores.

Señaló que espera que la Corte Suprema apruebe la formación del jurado, probablemente en la zona de Tampa Bay.

“Eso vendrá por medio de procesos legales que podrán obtener más información y hacer responsables a quienes cometieron ilegalidades”, dijo DeSantis.

El gobernador anunció además la creación de un “Comité para la Integridad en la Salud Pública”, integrado por muchos de los científicos y médicos que participaron en el panel del martes.