Exclusiva isla en Miami compra pruebas rápidas para sus residentes
Los empleados del lujoso complejo también se beneficiarán.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 4 años.
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La exclusiva isla de Fisher Island, compuesta por condominios y casas multimillonarias en Miami, compró miles de pruebas rápidas para detectar el coronavirus COVID-19 al Sistema de Salud de la Universidad de Miami (UHealth), para que los puedan utilizar todos sus residentes y empleados.
La isla privada, ubicada a lo largo de Government Cut, entre Miami y Miami Beach, y a la que solo se puede acceder por barco o helicóptero, llegó a un acuerdo con UHealth para que las pruebas estén disponibles para unas 800 familias que viven allí, así como para todos los trabajadores que mantienen las propiedades y patrullan sus calles, según consignó el diario El Nuevo Herald.
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La compra y la disponibilidad de los kits llamaron la atención porque contrastan notablemente con gran parte del resto del estado de Florida, donde solo cerca del 1% de la población ha sido examinada para detectar el coronavirus.
Las pruebas solo están disponibles para las personas que cumplan con ciertos criterios. Por ejemplo, las personas sin vehículos no tienen acceso a los lugares donde se hacen los exámenes. Luego, esas personas deben tomar una cita y esperar por un largo rato.
Sin embargo, eso no ocurre en Fisher Island, donde la membresía anual del Club Fisher Island cuesta alrededor de 250,000 dólares y el ingreso promedio anual era 2.5 millones en 2015, el más alto de cualquier código postal de Estados Unidos, según Bloomberg.
Sissy DeMaria, vocera de Fisher Island, señaló que la mitad de los residentes de la isla tienen más de 65 años, por lo que pertenecen al grupo de riesgo del coronavirus.
Se espera que las pruebas y el tratamiento de los que dieron positivo finalice esta semana. La isla ordenó suficientes pruebas para que todos los residentes y empleados pudieran ser analizados, dijo Lisa Worley, vocera de UHealth. La agencia tiene una clínica en Fisher Island cuyos médicos ayudaron con las pruebas.
Según cifras oficiales, hay entre cinco y nueve casos confirmados de COVID-19 en Fisher Island. DeMaria detalló que la isla cerró los campos de golf, tenis y las instalaciones de la marina, al tiempo que limitó el acceso a la isla a “personal y visitantes esenciales”.
Hasta el lunes por la tarde, el Departamento de Salud de Florida había reportado que casi 21,000 personas en el estado tenían coronavirus, de las cuales 470 murieron. Dentro de esto, el condado Miami-Dade tiene los números más altos de infecciones y de muertes.