¿Estados Unidos está de ánimo para las compras de fin de año?
Los partidarios de Donald Trump estarán de humor para gastar y quienes apoyaron a la demócrata Hillary Clinton, podrían usar las compras como un bálsamo emocional.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 8 años.
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NUEVA YORK— Terminó la incertidumbre sobre quién será el próximo presidente de Estados Unidos, pero la gente quedó amargamente dividida ¿Estarán los consumidores de ánimo para pensar en una temporada de compras navideñas que se nutre de sentimientos de alegría y paz?
Los informes de los minoristas —entre ellos tiendas departamentales como Kohl's, Macy's y J.C. Penney— muestran que los compradores habían comenzado a aumentar su gasto en las semanas previas a la elección que ganó el republicano Donald Trump. Son optimistas en general sobre una buena temporada de compras de fin de año, alimentada por trabajadores con salarios más altos e inventarios más delgados.
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"Una base de consumidores relativamente feliz es un grupo de consumidores dispuesto", dijo Greg Portell, socio de A.T. Kearney.
Los analistas creen que incluso después del rencor de la campaña, los partidarios de Trump estarán de humor para gastar y que quienes apoyaron a la demócrata Hillary Clinton u otro candidato podrían usar las compras como un bálsamo emocional.
"Es una terapia de menudeo de cualquier manera", opinó Marshal Cohen, analista en jefe de la industria para NPD Group, una firma de investigación de mercado.
Lo que los grandes almacenes veían antes de las elecciones era una mezcla. Macy's y Kohl elevaron sus pronósticos de ventas esta semana, luego de que vieron una mejoría. Nordstrom reportó un incremento en la medida clave de ventas y elevó sus perspectivas de ganancias.
Sin embargo, J.C. Penney redujo su pronóstico anual de un barómetro clave después de reportar una sorpresiva caída de ventas en momentos en que luchaba con un débil movimiento de ropa. Al igual que otros minoristas, el negocio de J.C. Penney ha sido volátil, con un repunte en el verano después de un inicio difícil del año.
En general, es normal que haya una caída en el menudeo antes de una elección presidencial, ya que la gente se distrae y los anuncios políticos acaparan mucho del espacio publicitario, pero el gasto generalmente rebota después.
En 2012 y 2004, el crecimiento interanual del menudeo disminuyó un promedio de 22% en septiembre y octubre, comparado con el periodo de enero a agosto, pero repuntó un promedio de 16% en noviembre y diciembre, según el grupo consultor AlixPartners.
Pese al optimismo de los minoristas, algunos consumidores están nerviosos por los cambios que traerá una presidencia de Trump.
Donna Jonas, una mujer jubilada que vive en Albuquerque, New Mexico, dice que comenzó a gastar menos hace un par de meses. La mujer de 63 años de edad, está preocupada de que Trump pueda privatizar el sistema de seguridad social. "Es mi futuro financiero el que me preocupa", dijo.