Washington. Las escuelas públicas de Denver, en Colorado, permanecían cerradas este viernes en una “pausa de salud mental” después que un estudiante hirió de bala a dos empleados administrativos y, según la Policía, se suicidó.

El superintendente del distrito escolar de Denver, Álex Marrero, explicó que la pausa, a la cual seguirá la vacación de primavera la semana próxima, “tiene el propósito de permitir que todos procesemos los acontecimientos de este año”.

El incidente del miércoles en la Escuela Secundaria East fue el décimo octavo tiroteo en una escuela o universidad en Estados Unidos en lo que va del año y ocurrió unas dos semanas después de la muerte del estudiante Luis García, de 16 años de edad, que fue baleado frente de la misma institución.

Decenas de docentes, padres y madres, por segundo día consecutivo, hicieron una manifestación frente al Capitolio de Colorado exigiendo que los legisladores apoyen leyes para la prevención de violencia con armas de fuego.

Según la oficina el médico forense del condado de Park, el cuerpo sin vida hallado la noche del miércoles a unos 80 km. (112 millas) al suroeste de Denver es el de Austin Lyle, el supuesto responsable del tiroteo y quien huyó de la escena tras los disparos.

El cuerpo de Lyle fue encontrado cerca de una camioneta roja que era buscada por la Policía, de acuerdo al alguacil del condado de Park, Tom McGraw. La presencia de Lyle en la zona había motivado que las autoridades emitieran una alerta para los vecinos.

El joven se encontraba bajo un plan de seguridad escolar, el cual implicaba que se sometiera a revisiones diarias al ingresar a la escuela.

El jefe de policía de Denver, Ron Thomas, dijo que el día de los hechos a Lyle lo registraron en un área administrativa lejos de otros estudiantes antes de ir a clase en esta secundaria ubicada no muy lejos de centro de Denver.

Los padres de familia de este centro escolar de unos 2,500 estudiantes expresaron su hartazgo por los recurrentes hechos de violencia que se registran en la escuela.

La muerte de García motivó a una marcha a la capital de Colorado realizada este mes para reclamar una mayor seguridad en las escuelas.

El tiroteo en esta escuela de Colorado es el segundo ocurrido esta semana en o cerca de un centro educativo de Estados Unidos, tras el registrado el lunes en el área metropolitana de Dallas-Fort Worth (Texas), que dejó a un estudiante muerto y a otro de 15 años arrestado como sospechoso.