PORTLAND, Oregón. Una inspección a un avión Boeing 737-800 que acababa de llegar a Oregón procedente de San Francisco, reveló que a la nave le faltaba un panel, dijeron las autoridades, el último de una serie de incidentes recientes con aviones fabricados por la compañía.

El vuelo 433 de United salió de San Francisco a las 10:20 de la mañana y aterrizó en el aeropuerto Rogue Valley International-Medford de Medford poco antes del mediodía, según FlightAware. La directora del aeropuerto, Amber Judd, dijo que el avión aterrizó sin incidentes y que se descubrió que le faltaba el panel externo, durante una inspección posterior al vuelo.

El aeropuerto interrumpió las operaciones para comprobar si había restos en la pista y en el aeródromo, dijo Judd, pero no se encontró ninguno.

Judd dijo que creía que el personal de tierra o los pilotos de United que realizaban una inspección rutinaria antes del siguiente vuelo fueron quienes se percataron de la falta del panel.

Un portavoz de United Airlines dijo por correo electrónico que en el vuelo viajaban 139 pasajeros y seis miembros de la tripulación, y que no se declaró ninguna emergencia porque no hubo indicios de los daños durante el vuelo.

“Después de que el avión estaba estacionado en la puerta de embarque, se descubrió que le faltaba un panel externo”, dijo el portavoz de United. “Llevaremos a cabo un examen exhaustivo del avión y realizaremos todas las reparaciones necesarias antes de que vuelva a servicio. También llevaremos a cabo una investigación para entender mejor cómo se produjo este daño.”

El panel que faltaba estaba en la parte inferior del avión, donde el ala se une a la carrocería y justo al lado del tren de aterrizaje, dijo United.

Según la Administración Federal de Aviación, el avión realizó su primer vuelo en abril de 1998 y fue entregado a Continental Airlines en diciembre de ese año. United Airlines lo opera desde el 30 de noviembre de 2011. Es un 737-824, parte de la serie 737-800 que fue precursora del Max.

Boeing remitió los comentarios sobre la flota y operaciones de las naves a United.

En enero, un panel que tapaba un espacio dejado para una puerta de emergencia adicional se desprendió de un Boeing Max 9 en pleno vuelo, pocos minutos después de que un vuelo de Alaska Airlines despegara de Portland, dejando un enorme agujero y obligando a los pilotos a realizar un aterrizaje de emergencia. No hubo heridos graves.

El tapón de la puerta se encontró finalmente en el patio trasero de un profesor de física de un instituto del suroeste de Portland, junto con otros restos del vuelo esparcidos por las inmediaciones. El Departamento de Justicia ha abierto una investigación penal.

El 6 de marzo, los gases detectados en la cabina de un Boeing 737-800 de Alaska Airlines con destino a Phoenix hicieron que los pilotos regresaran al aeropuerto de Portland.

El puerto de Portland declaró que los pasajeros y la tripulación se percataron de los humos y que el vuelo aterrizó sin novedad. Siete personas, entre pasajeros y tripulación, solicitaron evaluaciones médicas, pero nadie fue hospitalizado, según las autoridades.