Un récord de 24 millones de personas se han inscrito para obtener cobertura médica a través de la Ley de Cuidado de Salud Asequible, la legislación emblemática de salud del expresidente Barack Obama, mientras el programa enfrenta un futuro incierto bajo una Casa Blanca y un Congreso controlados por los republicanos.

Nunca tantas personas se habían inscrito en la cobertura de salud a través del mercado gubernamental, un punto de orgullo para muchos demócratas pero una señal de alerta para algunos republicanos.

El actual presidente, Joe Biden, ha impulsado una expansión del programa con una ley que incluye miles de millones de dólares en créditos fiscales que ampliaban quién podía optar al seguro de salud y redujeron su coste. Ahora, millones de estadounidenses más pueden pagar primas mensuales de solo unos pocos dólares para obtener cobertura.

El aumento en las inscripciones “no es coincidencia”, dijo Biden en un comunicado. “Cuando asumí el cargo, hice una promesa al pueblo estadounidense de que reduciría el coste de la atención médica y los medicamentos recetados, facilitaría la inscripción en la cobertura y fortalecería la Ley de Cuidado de Salud Asequible, Medicare y Medicaid”.

Pero el presidente electo entrante, Donald Trump, ha criticado el “Obamacare” durante años. Intentó desmantelarla sin éxito durante su primer mandato y ha prometido cambios, sin ofrecer un plan concreto, durante su segundo mandato. Las inscripciones disminuyeron durante el primer mandato de Trump, cuando su gobierno redujo la inversión en el programa, lo que incluía a los gestores que ayudan a las personas a inscribirse en la cobertura.

Además, los créditos fiscales que hicieron que la cobertura de atención médica fuera más asequible para millones de personas expirarán al final de este año, a menos que el Congreso apruebe una nueva ley.

Los legisladores enfrentarán una campaña de presión de hospitales y compañías de seguros, que ofrecen seguros médicos para el mercado, para que mantengan los créditos fiscales. Un grupo recién formado de algunas de las entidades de atención médica más grandes y poderosas, incluidos los principales aseguradores de salud del país, los sistemas de atención médica más grandes y asociaciones médicas notables, han formado una campaña llamada “Keep Americans Covered” para hacer lobby en el Congreso sobre el tema.

Sin embargo, es una pelea difícil con los republicanos, algunos de los cuales votaron en contra de la Ley de Cuidado de Salud Asequible en un principio y otros que votaron para derogarla años después. Aún así, algunos podrían vacilar ante la idea de una medida que, en la práctica, despojaría a sus votantes de la cobertura de atención médica.

La senadora republicana Lisa Murkowski dijo al Alaska Beacon la semana pasada que el Congreso “tendrá que continuar estos créditos fiscales para primas”, en una entrevista sobre el aumento de los costes de atención médica.

Pero otros republicanos han planteado preguntas sobre los créditos fiscales, especialmente ante el crecimiento continuo en las inscripciones. El año pasado, un grupo de representantes del Partido Republicano pidió una investigación sobre las inscripciones en la Ley de Cuidado de Salud Asequible, citando preocupaciones sobre que las personas están defraudando a los contribuyentes al declarar niveles de ingresos inexactos para cumplir los requisitos para una cobertura de salud más barata.

En una llamada con reporteros el martes, los funcionarios del gobierno de Biden respondieron a eso, diciendo que los sistemas automatizados verifican los ingresos de una persona con las declaraciones de impuestos del año anterior.

Trump, mientras tanto, ha descrito la Ley de Cuidado de Salud Asequible como “costosa” y dice que la cobertura de atención médica que ofrece es “deficiente”.

Pero aún no ha ofrecido un plan completo sobre cómo la mejoraría.

“Tenemos ideas de un plan que sería mejor”, dijo durante una entrevista en el programa “Meet the Press” de NBC el mes pasado.

El plazo de inscripción en HealthCare.gov termina el 15 de enero.