Estados Unidos está dejando atrás la fase “más explosiva” de la pandemia por coronavirus, aseguró ayer Anthony Fauci, el principal asesor médico de Joe Biden, al tiempo que predijo que la combinación de vacunas, tratamientos e infección previa pronto hará que el virus sea “más manejable”.

Fauci declaró al diario Financial Times que espera que en los próximos meses se terminen todas las restricciones relacionadas con la pandemia, incluido el uso obligatorio de tapabocas.

Se trata de sus comentarios más optimistas sobre la trayectoria de la pandemia desde la aparición de la variante Ómicron. Fauci esbozó un escenario en el que los departamentos de salud locales dirigirían la respuesta al virus en lugar de la administración Biden.

“A medida que salgamos de la fase de pandemia total de COVID-19, de la que ciertamente estamos saliendo, estas decisiones se tomarán cada vez más a nivel local en lugar de decidirse u ordenarse de forma centralizada. También habrá más personas que tomen sus propias decisiones sobre cómo quieren enfrentarse al virus”, dijo al periódico británico el asesor médico.

Cuando se le preguntó cuándo podrían terminar las restricciones, dijo que esperaba que fuera “pronto”, y aunque no dio plazos, pronosticó que probablemente ocurrirá este año. Pero advirtió que los departamentos de salud locales podrían reintroducir las medidas temporalmente si se detectan brotes en las comunidades.

¿El fin de la pandemia?

El testimonio de Fauci está en línea con la creciente sensación de optimismo entre los funcionarios sanitarios de todo el mundo que han observado que el comportamiento de la variante Ómicron puede significar el final de la fase más dañina de la pandemia.

El director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas ha sido una de las voces más cautelosas de Estados Unidos sobre la pandemia y con frecuencia contradijo a Donald Trump cuando consideró que el ex presidente estaba minimizando los riesgos del virus.

Más de 900,000 personas han muerto en Estados Unidos del virus. Aunque el número de muertes diarias en el país sigue estando cerca de los niveles récord, las nuevas infecciones han empezado a descender rápidamente, tras un patrón similar en países como Sudáfrica y el Reino Unido.

Fauci no afirmó que el virus se está convirtiendo en “endémico”, como dijeron algunos líderes sanitarios, pero habló de la posibilidad de que pronto se alcance un “equilibrio”, en el que el gobierno ya no tenga que prestar tanta atención a los niveles de infección.

“No hay forma de erradicar este virus”, dijo. “Pero espero que estemos ante un momento en el que tengamos suficientes personas vacunadas y suficientes personas con protección frente a la infección anterior que las restricciones de COVID sean pronto cosa del pasado”.

Añadió que no creía que todos los estadounidenses necesitaran refuerzos regulares de la vacuna para mantener el virus a raya. “Dependerá de quién seas”, dijo. “Pero si eres una persona normal y sana de 30 años sin enfermedades subyacentes, puede que necesites un refuerzo sólo cada cuatro o cinco años”.

El Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas ya está planificando para la próxima pandemia, centrándose en el seguimiento de los virus y familias de virus que se sabe que crean enfermedades graves, informó el experto.

Para hacer frente a futuros brotes se necesitará una combinación de vacunas y terapias. “Desde el principio del brote estuvimos probando enfoques terapéuticos”, dijo, señalando el desarrollo del remdesivir, un tratamiento que “se encontró en el primer o segundo mes” de la pandemia. “Ahora es una de las cinco intervenciones que pueden mantener a los pacientes fuera del hospital”, añadió.