El acusado de atropello en Times Square se declara inocente
Rojas ya había sido acusado de otros crímenes, y poco antes del atropello de Times Square se había declarado culpable de acoso.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 7 años.
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El hombre acusado de atropellar intencionalmente a varias personas el pasado mayo en la concurrida plaza neoyorquina de Times Square, que resultó en la muerte de una joven, se declaró hoy inocente en un tribunal de Manhattan.
Richard Rojas, de 26 años y residente del condado de El Bronx, había sido acusado, entre los 50 cargos presentados contra él, de asesinato, intento de asesinato y asalto después de empotrar su coche contra una multitud de gente que se encontraba en Times Square el pasado 18 de mayo.
Según informó en su momento la Policía, Rojas, que mató a una turista de 18 años y dejó cerca de una veintena de heridos, había consumido marihuana combinada con una droga conocida como PCP, que puede distorsionar las percepciones visuales y auditivas.
La Fiscalía, sin embargo, puso de relieve durante la vista la intencionalidad del crimen y la gravedad de los hechos.
"El sitio en el que se cometió el atropello es uno de los más concurridos de Nueva York: más de 300.000 peatones visitan Times Square todos los días", afirmó el fiscal del distrito de Manhattan Cy Vance, según la cadena ABC.
"Como indica el auto de acusación, el acusado puso en peligro la vida de cada persona que tuvo la mala suerte de cruzarse en su camino cuando dirigió su coche intencionadamente a la acera, golpeando y matando a una mujer joven que visitaba la ciudad e hiriendo a otras 18", agregó.
La Fiscalía también apuntó que Rojas había afirmado después del accidente que quería "matarlos a todos", y opinó que la Policía debió haberle disparado para evitar el incidente.
Rojas ya había sido acusado de otros crímenes, y poco antes del atropello de Times Square se había declarado culpable de acoso después de amenazar con un arma blanca a un notario en su residencia.
Ex miembro de la Armada estadounidense, Rojas regresó con problemas de su servicio en la Marina, entre 2011 y 2014, y bebía con frecuencia y que se quejaba de sufrir de pesadillas y delirios con demonios, según relataron sus vecinos de El Bronx.