Un derrumbe redujo a escombros una casa en renovación de Los Ángeles, arrancó la piscina y la terraza de una segunda vivienda, y dejó la piscina de una tercera al borde de una enorme fisura la mañana del miércoles.

El derrumbe ocurrió justo antes de las 3 de la mañana en Sherman Oaks, un vecindario de residencias de lujo a unas 12 millas al noreste del centro de la ciudad. No se encontraron víctimas en una búsqueda inicial, pero varias personas fueron evacuadas de una de las casas, dijo en un comunicado el Departamento de Bomberos de Los Ángeles.

De momento, no se han indicado las causas del derrumbe, pero se han producido muchos de ellos en el sur de California debido a las torrenciales tormentas invernales que han saturado el suelo.

Desde el 1 de enero, en el centro de Los Ángeles han caído casi 41 centímetros (16 pulgadas) de lluvia, que es casi el doble de lo que normalmente se produce en esta época del año. Para principios de febrero, en la ciudad se reportaron casi 600 aludes de lodo, se han puesto en alerta roja 16 construcciones por considerarse inseguras para entrar en ellas, y en alerta amarilla a otras 30, limitando el acceso a las mismas.

Un video tomado desde el helicóptero de un noticiero reveló la magnitud del derrumbe. La casa destruida, que parecía estar en renovación, quedó aplastada y la mayor parte de su techumbre yacía en el suelo.

En días recientes, se ha reducido el número de tormentas en el sur de California, pero los aludes y caídas de rocas han continuado. Varias secciones de la autopista de la costa del Pacífico en Malibú y la ruta estatal 27 que atraviesa el Cañón Topanga, al oeste de Los Ángeles, han resultado fuertemente dañadas.

Es posible que vuelvan a producirse algunas lluvias este fin de semana, indicó el Servicio Meteorológico Nacional.