La situación económica que atraviesa la comunidad latina en Colorado ha llevado a un segmento de los votantes latinos que se declaraban como independientes o indecisos a registrarse como republicanos y votar por el expresidente Donald Trump (2017-2021) en las próximas elecciones presidenciales del 5 de noviembre.

De acuerdo al estudio ‘la Agenda de Políticas Públicas de Colorado de 2024′, basado en entrevistas a 1,600 latinos residentes de ese estado, el porcentaje de latinos registrados en el Partido Republicano en Colorado creció del 17 % en 2020 al 25 % en la actualidad.

El porcentaje de latinos que se inclinó por los demócratas se mantuvo prácticamente sin cambios: 47 % en 2020 contra 49 % en 2024.

Pero el principal cambio de preferencias se dio entre los votantes latinos independientes, que pasaron del 28 % en 2020 al 21 % este año. Dicho de otro modo, una parte de los independientes ahora se afiliaron con los republicanos y lo hicieron con toda la intención de votar por el expresidente Trump, según se desprende de la encuesta.

En la actualidad, el 25 % de los latinos de Colorado se describe como “más conservadores” que en las elecciones de 2020, en contraste del 36 % identificándose como “más liberales”.

Y el 76 % de los votantes latinos republicanos afirma estar “ciento por ciento seguro” de votar por Trump, comparado con el 68 % de los demócratas hispanos que con seguridad votarían por Kamala Harris.

Agobiados por la situación económica

El golpe al bolsillo representa una de las principales prioridades de los latinos en Colorado, al igual que la mayoría de votantes en otras partes del país. La encuesta encontró que la situación económica de dos de cada tres encuestados (65 %) no ha mejorado desde 2020 y más de la tercera parte (35 %) en este estado “vive peor” que el año pasado.

En esa línea, más de la mitad de los latinos (56 %) sólo tiene 1,000 dólares de ahorro o menos, advirtió el reporte de 44 páginas presentado por Voces Unidas de las Montañas y por la Organización Latina de Colorado de Oportunidades y Derechos Reproductivos (COLOR).

“Por cuarto año consecutivo, los problemas económicos dominan la lista de preocupaciones de los votantes latinos en Colorado, quienes ven la necesidad de abordar la inflación y el creciente costo de vida como sus principales prioridades políticas”, dice el reporte.

A los latinos de este estado también les preocupa “los bajos salarios, los altos costos de atención médica y la falta de viviendas asequibles”.

Además de los problemas económicos postpandemia, otra posible razón para explicar el aumento del respaldo latino a Trump en Colorado es el rechazo por parte de la mayoría de los latinos en este estado hacia la Administración del presidente de EEUU, el demócrata Joe Biden.

Específicamente, el 55% de los votantes indicó que “el gobierno y los funcionarios electos no han sido eficaces” para responder a las necesidades de la comunidad, con sólo el 39 % respaldando a los funcionarios. Y el 51 % dijo que “el país va en la dirección equivocada”, con sólo el 39% compartiendo una opinión similar sobre Colorado.

“Después de cuatro años de investigación, las tendencias de los desafíos económicos que enfrentan los latinos de Colorado están bien establecidas. Es necesario que los funcionarios, en todos los niveles, local, estatal y federal, tomen medidas”, expresó Alex Sánchez, director ejecutivo de Voces Unidas durante una conferencia de prensa virtual al presentar el informe este miércoles.

A pesar de la creciente importancia del voto latino, el sondeo encontró que el 44 % de los votantes hispanos de Colorado nunca ha sido contactado por un candidato, por el equipo de un candidato, por un partido político, o por una organización que impulse la participación en los próximos comicios.

Según el portal FiveThirtyEight, que elabora una media entre las encuestas, la vicepresidenta Kamala Harris aventaja a Trump por más de 10 puntos el 52 % frente al 42 % en Colorado.

Desde la elección de Barack Obama en 2008 Colorado ha sido considerado un bastión demócrata, si bien antes era señalado como un estado bisagra y cuya mayoría se inclinó por el Partido Republicano en nueve elecciones presidenciales, desde 1968 hasta 2004.