Centro de Estudios Puertorriqueños en Nueva York rinde tributo a Lorenzo Homar
Habrá una exhibición en la galería del centro, ubicado en El Barrio latino de Harlem, donde se estableció la gran emigración boricua en la década de 1950.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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Nueva York - El Centro de Estudios Puertorriqueños rinde tributo a Lorenzo Homar, el "maestro de maestros" de las artes plásticas puertorriqueñas, con la muestra "Homar: Art Binding Ties from Puerto Rico to NYC", que abre hoy y permanecerá en exhibición hasta el 30 de septiembre.
Grabados, carteles, caricaturas, libros así como una entrevista hecha a Homar en 1983 por el personal del Centro de Historia Oral son parte de la exhibición, en que también se muestran fotos del artista como acróbata, un arte que también cultivó.
La exhibición, en la galería del Centro de Estudios Puertorriqueños en El Barrio latino de Harlem, donde se estableció la gran emigración boricua en la década de 1950, es parte de la celebración que comenzó el año pasado en la isla con motivo del centenario del nacimiento de Homar (1913-2004), dijo a Efe el archivista Pedro Juan Hernández.
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Explicó que durante la conmemoración en la isla se sugirió que se extendiera al Centro, entidad que documenta la historia de los puertorriqueños en este país.
"A un artista como Lorenzo Homar hay que celebrarlo a través de su obra, por lo que comenzamos a evaluar obras que nos han donado a través de los años. No son muchas, porque no somos un museo", agregó.
Homar fue clave, junto a otros artistas de la generación del 50, en el desarrollo del cartel en Puerto Rico.
Entre las piezas en esta muestra destacan carteles anunciando actividades políticas, sociales y culturales, algunos vinculados con la experiencia de los puertorriqueños en Nueva York, donde Homar vivió desde los 14 años hasta que regresó a Puerto Rico cuando tenía 37 años, en 1950.
Homar, hijo de emigrantes de mallorquines que se conocieron en Puerto Rico, ingresó en 1931 a la Liga de Estudiantes de Arte en Nueva York bajo la tutela del canadiense George Bridgeman, destacado dibujante del cuerpo humano, a la vez que continuaba practicando el deporte.
En 1937 comenzó como aprendiz de joyeros para la casa Cartier en Nueva York, para la que luego trabajó durante diez años, tras servir al ejército durante la II Guerra Mundial. De vuelta a esta ciudad, se matriculó en la Escuela de Arte de Brooklyn, donde tuvo entre sus profesores al mexicano Rufino Tamayo.
También se exhibe una reproducción de piezas de la famosa serie de grabados sobre las plenas, ritmo autóctono de Puerto Rico, que hizo junto a Rafael Tufiño.
Homar, Tufiño y Rafael Torres Martinó cofundaron el Centro de Arte Puertorriqueño en la década de 1950 en la isla.
"Las plenas son parte de un portafolio, de una iniciativa de Homar y Tufiño que querían resaltar la importancia de la plena en la historia de Puerto Rico y en particular, reconocer a Manuel Jiménez "Canario", uno de los principales intérpretes del género y autor, indicó Hernández.
El conocido artista Antonio Martorell, que figura entre sus exdiscípulos, aseguró a Efe que "no se puede hablar" de Homar sin hablar de su formación en esta ciudad y su identificación con los puertorriqueños dondequiera que estuvieran "porque su identificación era con el pueblo, su bienestar y la independencia".
Tampoco "se puede hablar del cartel puertorriqueño sin su magisterio. El y Tufiño fueron los dos pilares" de su desarrollo.
Recordó que Homar "no tenía límites" y su trabajo también incluye portadas de discos, diseño de escenografía, vestuario y joyas, e ilustración de libros, entre otros, a la vez que destacó su amor por la música, especialmente por el jazz.
"Sigue siendo el maestro de maestros", dijo y agregó que de su maestro recuerda "su entusiasmo relacionado al trabajo, su disciplina guiada por el querer hacer y de contribuir por un mundo mejor".