Bajo múltiples ataques un símbolo del racismo
Protestas, debates legislativos y decisiones empresariales se agolpan en las pasadas horas en contra de la bandera confederada.
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 9 años.
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Washington. La bandera confederada, para muchos símbolo del racismo en Estados Unidos, está inmersa hoy en el ojo del huracán.
Ambas cámaras del Capitolio de Carolina del Sur acordaron hoy iniciar un debate sobre la posibilidad de retirar la polémica bandera confederada situada en el exterior del Parlamento estatal, como han solicitado numerosos políticos después de la matanza de la semana pasada en una iglesia de Charleston (Carolina del Sur), donde un hombre blanco Dylann Roof que se identifica con esa bandera presuntamente mató a nueve negros.
Cientos de personas se congregaron hoy frente al Capitolio estatal para exigir a los legisladores que debatan y aprueben una ley para retirar el controvertido emblema.
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Es un debate que no se ha limitado a este estado. El gobernador de Virginia, Terry McAuliffe, anunció hoy que su estado retirará el controvertido emblema de todas las matrículas de vehículos emitidas en su territorio, por considerarla un símbolo "divisivo y dañino", mientras en Misissippi también se debate si se debe modificar la bandera estsatal para eliminar ese emblema.
Asimismo, la cadena minorista Walmart, el portal eBay, y otras tiendas han anunciado que dejarán de vender la bandera.
"No queremos vender productos que pongan a nadie en una situación incómoda", dijo hoy el presidente y consejero delegado de Walmart, Doug McMillon, en declaraciones a la cadena de televisión CNN un día después de anunciar que retirarán la controvertida enseña.
El mayor grupo de comercio minorista del mundo explicó en un comunicado que los productos que incluyan la bandera confederada serán retirados de sus locales y de su página web.
El portal de subastas eBay anunció hoy que también prohibirá la venta de la bandera confederada y de otros objetos relacionados por haberse convertido en un "símbolo de división y de racismo".
Un día después de que la gobernadora de Carolina del Sur, la republicana Nikki Haley, pidiera retirar la bandera confederada del jardín del Parlamento estatal, los legisladores de la Cámara de Representantes aprobaron, con 103 votos a favor y 10 en contra, una moción para iniciar un debate sobre esa posibilidad.
El Senado estatal aprobó poco después por voto verbal otra moción que le permite incluir en la sesión especial de hoy, convocada inicialmente para hablar sobre el presupuesto, el debate sobre la bandera confederada.
La bandera confederada divide a Estados Unidos desde su Guerra Civil (1861-1865). Es un emblema adoptado en ese conflicto por los estados secesionistas en el sur de la nación -y favorables a la esclavitud- de la Confederación frente a la Unión (estados norteños). Para algunos, refleja parte de la historia e identidad de su estado, mientras que para otros se trata de un emblema racista.
Retirar la bandera confederada del Parlamento estatal requiere la aprobación de dos tercios de cada una de las dos cámaras que lo forman, y es probable que el debate al respecto dure semanas, según algunos legisladores.
Una ley estatal de 2000 requiere que la insignia ondee en los jardines del Capitolio, a donde se trasladó ese año después de que alrededor de 46,000 personas exigieran en una protesta que se retirara la bandera de la cúpula del Parlamento, donde se encontraba desde hacía medio siglo.