Una asesora de la Casa Blanca aseguró el domingo que la separación forzosa de niños de sus padres en la frontera no es culpa del presidente Donald Trump. 

“A nadie le gusta” la separación de familias, dijo Kellyanne Conway en el programa “Meet the Press” de la NBC. 

Casi 2,000 fueron separados a la fuerza de sus padres en un periodo de seis semanas en abril y mayo, debido a la política del secretario de Justicia Jeff Sessions de “tolerancia cero” contra la inmigración ilegal. 

Conway negó que Trump está tratando de usar el tema para obligar a los demócratas a aceptar sus condiciones en cuando a la inmigración y a la construcción de un muro en la frontera. 

Pero aseveró: “Si los demócratas son serios en el tema, se reunirán otra vez y corregirán estas fallas y obtendremos una verdadera reforma migratoria”.