Ma Yang, una residente permanente legal en Estados Unidos desde su niñez, fue deportada a Laos el pasado 6 de marzo de 2025, a pesar de nunca haber vivido en ese país ni hablar su idioma.

La mujer, de 37 años y madre de cinco hijos, pasó casi toda su vida en Milwaukee, Wisconsin, hasta que fue detenida por agentes de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) y enviada a un destino completamente ajeno a su historia.

La detuvieron y deportaron sin aviso

Nacida en un campamento de refugiados en Tailandia y proveniente de una familia hmong que huyó de la guerra de Vietnam, Yang llegó a Estados Unidos a los ocho meses de edad. A los siete años, obtuvo la residencia legal en el país. A pesar de este estatus, su situación cambió en 2022 cuando fue declarada culpable de un delito relacionado con el tráfico de marihuana y cumplió una pena de prisión de dos años y medio.

Tras cumplir su condena, Ma Yang cumplió con los controles regulares de ICE. Sin embargo, en febrero de 2025, recibió una llamada de las autoridades migratorias pidiéndole que acudiera a una cita que, según su testimonio, estaba programada con una anticipación de nueve meses. Durante esa cita, fue detenida y trasladada a un centro de detención en Indiana.

El 6 de marzo, a pesar de las expectativas de su abogado de que Laos rara vez aceptaba deportaciones desde Estados Unidos, Yang fue enviada al país asiático. El traslado incluyó escalas en Atlanta y Corea del Sur antes de llegar a Vientián, la capital de Laos. Una vez allí, estuvo bajo custodia de las autoridades militares, sin acceso a sus documentos ni comunicación con el exterior durante los primeros cinco días.

Condiciones adversas en Laos

El destino de Yang en Laos es incierto y su situación es crítica. La mujer no habla el idioma local, no tiene familiares en el país y enfrenta dificultades para acceder a los medicamentos que necesita para tratar su diabetes e hipertensión.

En una entrevista con Milwaukee Journal Sentinel, expresó: “Estados Unidos me envió a morir. No sé a dónde ir ni qué hacer”. Además, añadió que se ve imposibilitada de realizar cualquier actividad cotidiana como alquilar o comprar debido a la falta de documentación. “¿Cómo puedo alquilar, comprar o lo que sea sin papeles? Ahora mismo no soy nadie”, comentó.

Este caso podría marcar la primera deportación de la administración Trump hacia Laos, aunque no existen registros oficiales al respecto. Según datos de 2024, no hubo deportaciones a Laos en el último año fiscal desde Estados Unidos.

Intentan repatriarla a Estados Unidos

Ante esta situación, la familia de Ma Yang ha comenzado una campaña para traerla de vuelta a Estados Unidos. Su pareja, Michael Bub, inició una campaña en GoFundMe para recaudar fondos con el fin de financiar su regreso. “Ella no es una traficante de drogas, no está organizando una estafa, no es líder de una conspiración criminal. Es esposa, hermana, mentora, amiga. Es una madre como tantas”, detalló Bub en la página de la campaña.

En Milwaukee, Ma Yang deja a sus cinco hijos, de entre 6 y 22 años, y a su pareja, quien enfrenta problemas de salud derivados de cirugías cerebrales y pérdida de memoria. La familia teme que la situación de Yang empeore sin el apoyo médico ni los recursos necesarios en Laos.