Ariel Castro pudo haber muerto de asfixia auto erótica
Nota de archivo: esta historia fue publicada hace más de 12 años.
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Ohio.- El secuestrador y torturador de Cleveland, Ariel Castro, pudo haber muerto por asfixia auto erótica, no suicidio, y dos guardias de la prisión falsificaron los registros que documentan la observación de él en las horas antes de morir, dijo hoy el estado de Ohio.
Castro fue hallado con los pantalones y la ropa interior de Castro en los tobillos, lo que lleva al Estado a remitir los datos a la patrulla de autopistas del estado para considerar la posibilidad de asfixia auto erótica, según el informe del Departamento de Rehabilitación y Corrección de Ohio.
El informe sugiere -pero no concluye- que Castro pudo haber muerto a consecuencia de asfixia auto erótica, método por el cual los individuos a alcanzan la satisfacción sexual asfixiándose a sí mismos hasta quedar inconscientes.
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Castro no dejó una nota de suicidio y "múltiples niveles de evaluación" no se encontraron tendencia suicida, dijo el informe. Una evaluación integral de la salud mental no encontró "ninguna evidencia de enfermedad mental grave o indicaciones de que precauciones de suicidio estaban presentes", según el informe.
Un vídeo de vigilancia indica que los guardias no hicieron por lo menos ocho monitoreos necesarios en la tarde y la noche antes de que Castro muriera. Dos monitoreos se realizaron correctamente antes de que Castro se colgara el 3 de septiembre en centro penitenciario de las afueras de Columbus.
El informe también dijo que una ambulancia contratada para proveer asistencia médica llegó significativamente más tarde, pero que el retraso probablemente no afectó el resultado.
El informe también dijo que el personal falló en hacer que Castro viera un video sobre la prevención del suicidio cuando llegó por primera vez a prisión en agosto.
Castro, de 53 años, cumplía un par de semanas de una sentencia de cadena perpetúa después de declararse culpable en agosto por el secuestro de tres mujeres en Cleveland, y luego encarcelarlas en su casa durante una década, tiempo en el que las violó en repetidas ocasiones y las golpeó. Fue acusado de limitar su acceso a los establecimientos de alimentos y aseo, y encadenarlas a un poste en el sótano. Una niña de 6 años de edad, hija de Castro, fue rescatada junto con las tres mujeres en mayo.