WATERBURY, Connecticut. Un hombre de Connecticut fue sentenciado el miércoles a 90 años de prisión por su papel en el asesinato con una bala perdida de la madre de un dos veces tiradora olímpica de rifle de Puerto Rico, Yarimar Mercado Martínez.

El juez Brian Preleski dictó sentencia a Franklin Robinson, de 40 años, uno de los tres hombres acusados por la muerte de Mabel Martínez Antongiorgi, de 56 años. La mujer estaba cosiendo en su casa en Waterbury, a unas 30 millas al suroeste de Hartford, cuando una bala atravesó una pared y la alcanzó en la cabeza el 9 de abril de 2022.

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La hija de Martínez Antongiorgi, Yarimar Mercado Martínez, compitió por Puerto Rico en los Juegos de 2016 y los de 2020, retrasados por la pandemia. La deportista se encontraba en Brasil para otra competición cuando mataron a su madre.

Yarimar Mercado celebra la conquista de su primera medalla de oro en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe. Está compitiendo en esta justa por cuarta ocasión en su carrera.  (Copur)
Yarimar Mercado celebra la conquista de su primera medalla de oro en unos Juegos Centroamericanos y del Caribe. Está compitiendo en esta justa por cuarta ocasión en su carrera. (Copur) (Suministrada)

Un jurado condenó a Robinson por asesinato y otros cargos en julio. Los otros dos hombres están a la espera de juicio.

Donald Meehan, el defensor público de Robinson, condenó la sentencia como un “impuesto de juicio severo”, impuesto a su cliente porque no aceptó una oferta de declaración de culpabilidad que le habría llevado a una sentencia de 40 años.

“Como ocurre con todos los acusados, incluidos los inocentes, la oferta fue un esfuerzo para incitarlo a declararse culpable y renunciar a sus derechos a un juicio justo y a confrontar a los testigos en su contra y, como siempre, viene con la amenaza incorporada de recibir potencialmente una sentencia como la que recibió Robinson hoy si es declarado culpable después de un juicio”, escribió Meehan en un correo electrónico a The Associated Press.

Según el testimonio del juicio, un Robinson celoso estaba disparando contra un hombre que había saludado a la novia de Robinson otro día. Después de pelear con el hombre y algunos de sus amigos, Robinson reunió a un par de personas que conocía para que lo ayudaran a perseguir al hombre.

Los tres dispararon contra un automóvil estacionado en la calle donde reside Martínez Antongiorgi, pensando que el hombre estaba dentro de él, según el testimonio del juicio. Otro transeúnte resultó herido pero sobrevivió.

Robinson no disparó la bala fatal, pero debido a su presunto papel, fue acusado de asesinato según la ley de Connecticut. Los fiscales lo describieron como líder de un plan mortal al atacar a la víctima prevista y reclutar ayuda.

Al momento de la muerte de su madre, Mercado Martínez lamentó en publicaciones en las redes sociales que “no podía ni despedirse”.

“¿Por qué tú? ¿Por qué de esta manera?” ella escribió. “Estabas sentada en tu casita cosiendo, como siempre hacías”.

Martínez Antongiorgi y su esposo durante más de 30 años, John Luis Mercado, se mudaron a Waterbury desde Puerto Rico unos años después de que el territorio estadounidense soportara el devastador huracán María en 2017. En el momento de su muerte, habían fijado una fecha para renovar sus votos matrimoniales, escribió su hija en ese momento.